Análisis de The Witch’s House MV

RPG Maker es una herramienta muy interesante que permite que creemos nuestras obras al estilo gráfico de los juegos de rol con vista cenital o isométrica de la época de SNES. Gracias a esto, han nacido muchos títulos de culto como Corpse Party, Angels of Death o Mad Father que triunfan dentro del terror. Uno de estos juegos populares fue The Witch House, que salió en 2012 y que hace unos añños se rehizo utilizando la versión MV de RPG Maker, dando así lugar a The Witch’s House MV, una versión que aterriza ahora en Nintendo Switch.

Viola, no te adentres en el bosque…

VIola se ha perdido en el bosque sin posibilidad de salir de él, y una casa la llama por algún motivo. Así que sin pensarselo entra en ella, pero no puede salir de la misma. Siguiendo las indicaciones de la casa y de un gato negro, tendrá que llegar hasta la bruja para poder salir de la casa. La historia se resume en lo que ocurre en su epílogo (hay dos finales que pueden verse en una sola partida, pero también un secreto añadido para los que nunca guarden) y superar el viaje nos puede llevar cerca de una hora y media en nuestra primera partida, algo corto pero también es parte de que el título consiga tener encanto.

Disponemos de tres dificultades. La última de ellas se desbloquea al terminar el juego y añade complicaciones a algunos momentos de huida y a puzles, mientras que las otras dos se diferencian en si queremos que al morir (algo que pasará a menudo salvo que nos conozcamos el juego) aparezcamos al inicio de la habitación de la tragedia o si queremos aparecer en el último punto de guardado, por lo que generalmente recomendamos la primera opción.

El desarrollo se lleva a cabo a través de diferentes grupos de habitaciones que esconden un secreto para avanzar. Hemos de investigarlas, encontrar el objeto oportuno y usarlo donde corresponda para poder así continuar. Puesto que hay muchas pistas o texto sobre cómo avanzar de forma críptica, el hecho de que haya llegado con los textos en castellano se agradece, pero también hay que señalar que la traducción no es perfecta y que en una ocasión veremos una línea de diálogo en ruso y que hay acciones como “No cortar” que no reflejan la verdadera intención de lo que realizaríamos.

Susto sin parar en The Witch’s House MV

A lo largo de nuestro viaje nos esperan trampas y enemigos que nos liquidan de un solo golpe. Por ello morir es común, e incluso aunque estemos preparados nos pillarán por sorpresa en alguna ocasión (salvo que estemos rejugando la historia). En ocasiones hay que no realizar una acción que se nos permite hacer, usar un objeto o huir para evitar la muerte segura, aunque también es divertido ver las diferentes muertes que podemos sufrir en cierto modo.

Como el juego desde los pocos segundos de juego nos presenta este tipo de situaciones, sabe que estamos alerta siempre, y por ello introduce también muchos sustos rápidos en los que aparecen gotas de sangre, grietas en el suelo, estatuas que nos miran y otros momentos que es mejor no comentar (para que os pillen por sorpresa) en multitud de ocasiones para pegarnos un buen susto. Quizás haya demasiados, pero dada la duración del juego, consiguen que sea una experiencia más positiva que negativa.

Los puzles por su parte comienzan sencillos, pero luego van mejorando y juegan con la perspectiva o nos hacen pensar un poco más de la cuenta, por lo que podemos decir que están muy bien llevados para ser algo que nunca busca que estemos muchos minutos pensando, pero sí lo justo en más de una ocasión. En definitiva, es un título al que sabemos que podríamos pedir algo más, pero que nos deja un buen sabor de boca al completarlo (aunque quizás no por la historia).

Por último, es necesario hablar de su aspecto audiovisual de The Witch’s House MV. En lo sonoro hace un muy bien papel especialmente por los efectos de sonido, que son el complemento perfecto para los momentos de sobresalto. La música y el estilo gráfico son correctos, y ayudan a situarnos en la gran mayoría de ocasiones, pero no son un punto a destacar. Si buscaís algo ligero y atractivo para una noche de miedo (en compañía mejor), este título no os va a defraudar.