¿A quién no le apetecería volver a la época de Dreamcast por una temporada? Un deseo que Rainbow Cotton quiere hacer tangible gracias a esta versión remasterizada de un título que nunca salió de tierras orientales.
Buscando el dulce sagrado
Muchos estarán pensando en un nuevo cute ’em up de la simpática bruja Cotton tras disfrutar hace un tiempo de Cotton Fantasy. Y si bien los derroteros van por ahí, lo cierto es que esta vez toca vestir de tonos pastel un género similar: los rail shooter. Cual Star Fox o Panzer Dragoon, el mundo tridimensional creado por Success llega de la mano de ININ Games para coger la escoba y salvar al reino de las hadas en esta secuela del clásico Panorama Cotton aparecido en Mega Drive (y también disponible en la híbrida).
Subida a su escoba, nuestra adorable bruja avanza de forma automática por pueblos encantados y mundos submarinos mientras lanzamos magia a todo tipo de simpáticas criaturas multicolor. Todo con formas cuquis pero con sus buenas dosis de mala uva y certera puntería. En Rainbow Cotton no paramos de movernos esquivando enemigos y sus ataques mientras pulsamos repetidamente el botón de acción. Algo que por cierto acabará cansando en exceso nuestro pulgar porque si lo mantenemos pulsado la cadencia de disparo será mucho menor.
Jugablemente es un juego de acción muy sencillo y directo, no hay esquivas ni diferentes tipos de disparos o personajes, lo que penaliza un desarrollo excesivamente plano.
Esto último vuelve caóticos, tanto o más como su historia y mundo, los niveles del juego sin llegar a ver un patrón claro de enemigos y escenas. Disparamos y disparamos a monstruos para por un lado acabar con ellos y por otro mejorar el poder de ataque y hacer más daño. Esto y recoger ciertos ítems que cargan la barra de poder mágico para inundar el nivel con explosiones y lluvias de estrellas que acaben con todo lo que pillen por el camino. No es algo demasiado preciso pero nos puede salvar en los momentos rodeados de enemigos más comprometidos
Jugablemente es un juego de acción muy sencillo y directo, no hay esquivas ni diferentes tipos de disparos o personajes, lo que penaliza un desarrollo excesivamente plano. En el original era común que la propia Cotton interfiriera en el ángulo de visión y por esto, aunque siga sucediendo, se ha añadido el lock on sobre enemigos, lo que mejora nuestra precisión y la visibilidad en caso de que el personaje moleste en pantalla. Además, tenemos que tener en cuenta que el disparo no es frontal si no que, como es habitual, cursor y personaje suelen ofrecer angulaciones distintas al moverse.
No serán las mejores, pero sus escenas aportan mucha personalidad a la aventura.
Ahora en compañía
Rainbow Cotton ofrece cinco niveles con algunas bifurcaciones en ellos favoreciendo rejugadas y por lo tanto descubrir qué camino nos resulta más asequible o mejor para obtener una puntuación mayor. No es un juego especialmente exigente y con los 5 créditos iniciales, aunque toque comenzar de cero en caso de caer, será “sencillo” completarlo casi a la primera. Una horita de juego que a estas alturas se queda algo corta pero que si sumamos los cuatro niveles de dificultad puede ofrecer desafío suficiente como para complicarnos la existencia unas cuantas tardes más.
Además esta vez contamos con un modo cooperativo local, algo muy de agradecer, para compartir un género ya casi perdido en el tiempo y nos ayuden a superar su coloridos mundos escoba en mano. Quizá no son añadidos cruciales para un producto con tantos años a sus espaldas (nos remontamos al año 2000) y ni tan siquiera incluir la versión original a 4:3, cuando el remaster opta por vista panorámica, ayudan a que su experiencia sea demasiado efímera… pero sí le hacen que lo recibamos con los brazos abiertos.
Quizá sus añadidos añadidos no son cruciales para un producto con tantos años a sus espaldas pero sí le hacen que lo recibamos con los brazos abiertos
Porque incluso las múltiples secuencias anime, ahora con subtítulos en español, se han tratado ofreciendo una imagen limpia para seguir aportando ese toque particular y único al producto. Uno muy japonés, eso sí, con una historia absurda y cómica muy de agradecer a día de hoy que acompañan los inicios de cada fase y los enfrentamientos contra jefes. Estos pueden resultar algo sencillos, tanto por patrones como por desafío, pero su extravagancia y en ocasiones variedad resultan una buena guinda a un pastel ya de por sí de muchos sabores.
A pesar de su simplista diseño de juego, su propuesta divierte si no buscamos nada más allá que pasar un buen rato con su idea simpática y alocada. Algo que sabe acompañar bien su banda sonora, que aunque no pase a la historia, encaja como un guante así como las contantes conversaciones entre Cotton y las hadas de cada mundo. Una lástima que todas ellas se quedan en mero “ruido” ambiental por no venir acompañadas de subtítulos de ningún tipo porque efectivamente son voces en japonés. Lo que vendría a ser la mensajería por radio de Fox y compañía en los juegos de Nintendo.
Hay carencias que evitan pasar más tiempo con él como marcadores online, rutas alternativas, alguna que otra fase adicional o variantes de sus modos pero si buscas una nueva aventura de la bruja y, sobre todo, un shooter sobre raíles diferente, aquí encontrarás uno que sigue divirtiendo como el primer día. Eso sí, técnicamente a pesar de sus 60 fps resulta visualmente pobre y algunos modelados hubieran agradecido contar con cierta revisión, pero también es parte del encanto de la época en la que nació e historia de la evolución del mundillo.
No queda otra que acabar con esos adorables monstruos de colores.
Versión del juego analizada: 1.0.0
