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Análisis de Subnautica: Below Zero

Hace tan solo unos días os dejábamos con el análisis de Subnautica, un survival con importantes dosis de exploración y crafteo subacuáticos que también ha recibido su secuela en Nintendo Switch. Subnautica: Below Zero no reinventa la rueda, pero sigue haciendo las cosas bien y añade un poco más de mimo a la historia y la posibilidad de salir del agua, aunque sea poco.

Rompiendo el hielo

Subnautica: Below Zero se parece mucho a su primera parte, tanto es así que incluso volveremos a visitar el mismo planeta, aunque esta vez en un hemisferio diferente donde el hielo será el principal protagonista y uno de los grandes factores de riesgo a tener en cuenta. Pero hay varias diferencias que lo alejan de su predecesor, empezando por la excusa que nos llevará a estrellarnos otra vez en sus aguas y siguiendo por los planos que podremos construir esta vez, con mayor presencia de vehículos que facilitarán y mucho los desplazamientos (en el anterior también había algo parecido pero esto es mejor), y sobre todo la posibilidad de salir del agua. El hielo también esconderá sus secretos y diversos objetos a recolectar, pero no os asustéis, que serán partes muy pequeñas y más del 90 % lo pasaremos debajo del agua observando unos escenarios que esta vez han ganado en color, y eso que los del primer título no estaban tampoco faltos. Y mejor, porque el ir a pie suma un nuevo indicador, el del frío, por si no teníamos bastante con el hambre, la sed, vida… Por suerte y como ya ocurriera con la primera entrega, habrá varios niveles de dificultad donde no en todos habrá que estar atentos de tantas cosas.

Pero volvamos a su historia, bastante más marcada esta vez. Ahora manejaremos a Robin Ayou, una xenologista que viaja al planeta en busca de su hermana desaparecida y que por el camino encontrará además vida extraterrestre inteligente no corpórea, lo que sumará una nueva misión a nuestra lista de tareas (encontrarle un cuerpo). Esto pretende hacernos enfatizar en la exploración y en cierta manera lo consigue, pero también es verdad que suma otra preocupación más a una lista de por sí bastante larga. Y es que Subnautica: Below Zero puede jugarse perfectamente sin haber catado siquiera el anterior, pero quienes lo hayan hecho tendrán un importante plus. Además y siguiendo con las diferencias, esta vez la protagonista a la que encarnamos habla, ya no somos un ente mudo, mostrando así sus emociones (sobre todo su malestar); habrá a quien esto le resulte un punto a favor y quien piense que así la inmersión es menor al no sentir ya que somos nosotros los exploradores sino una tercera persona, y es cierto.

Lo bueno de Robin es que se apaña igual de bien dentro que fuera del agua, la gran novedad de esta secuela. En la superficie hay nuevos materiales y criaturas, lo que supone nuevos planos a crear. Porque en eso no cambia un ápice, ni los menús, la PDA y multitud de criaturas submarinas, vaya; la creación lo es todo y sigue sin haberse agilizado ese poquito que echamos de menos en nuestro análisis de hace unos días. Un mal menor que, como ya dijimos, añade un toque de realismo que tanto agradecen los survival, y esta no es una excepción.

Por lo demás, Subnautica: Below Zero es calcado al anterior juego, pero al menos todas las localizaciones son nuevas y parte de su fauna también. Destacan asimismo los nuevos vehículos y las nuevas opciones en materia de edificación, que además nos harán la vida aún más fácil (que no es que lo sea, ni por asomo, vaya). También se ve y se oye igual, de bien, al menos. Aquí puede que haya algo más de color y variedad, y eso, hablando de un paraje helado, no es nada sencillo, pero los desarrolladores nos han brindado unos entornos en el fondo oceánico la mar de ricos.

Si probaste el primero y te gustó, esta segunda parte no te defraudará, pero ten en cuenta que novedades de peso tampoco tiene, aunque las pequeñas que ha traído consigo han sido para bien; claro que siempre podían haber sido más y mejores, pero el resultado les ha seguido saliendo bastante redondo, aunque ahora sin causar la positiva sorpresa que causó el primero.

Resumen
Una buena segunda parte pero demasiado continuista, tanto es así que es un calco en materia de creación, salvo planos de vehículos y edificios avanzados, y en buena parte de su fauna, animaciones, etc. Si algo funciona, no lo toques, de acuerdo, aunque esto quizás ha sido algo excesivo. Al menos se ha tomado más en serio su historia.
7.5
Bueno
Escrito por
Señor Bichos para ti.

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