Los amantes de los puzles y de las buenas historias estamos de enhorabuena, porque llega a nuestras Nintendo Switch un título que nos va a recordar a las aventuras clásicas. Hablamos de Röki, un juego capaz de remover algo dentro de nosotros.
Demasiado pronto para dejar de ser niños
Röki es una aventura gráfica inspirada en los grandes clásicos del género. Encarnamos a Tove, una chica joven que se ve obligada a cuidar de su familia y en especial de su hermano Lars. Hasta que un día una bestia terrorífica aparece en mitad de la noche y rapta al pequeño Lars, destrozando lo que quedaba de este hogar. Comienza así una aventura en el que nuestro principal objetivo es rescatar a nuestro hermano y cerrar heridas que todavía estaban muy abiertas.
De esta forma nos adentramos en un mundo en el que la fantasía y recuerdos cobran un importante protagonismo. Recorremos gélidos escenarios nórdicos de sorprendente belleza. En ellos vamos a conocer los restos y los habitantes basados en la mitología que quedan y pueblan unas tierras que ya no viven sus mejores días.
Estilo clásico
La jugabilidad principalmente se basa en explorar estos bellos escenarios. Curioseando aquí y allá, sorprendiéndonos con cosas que están fuera de lo normal y recogiendo objetos que, como no podía ser de otra manera en el género de las aventuras gráficas, se depositan en nuestro inventario.
Hacemos interactuar los objetos recogidos con zonas/lugares específicos de los escenarios para conseguir otros objetos, abrirnos camino hacia nuevas zonas, o realizar favores a cambio de más favores. Incluso combinamos objetos dentro de nuestro inventario entre sí para poder resolver los puzles.
La dificultad que plantea saber utilizar los ítems, a pesar de que a lo largo de la aventura haya momentos de mayor intensidad que otras y no avance de manera exponencial, no es enrevesada. Todo se resuelve con bastante lógica y nunca hay nada que sobre o esté por estar, así que explorando los escenarios siempre encontramos todas las respuestas. Por lo que si nos atascamos en algún momento lo más seguro es que haya que volver a revisitar los escenarios más a fondo porque nos hemos dejado algo sin recoger.
Belleza pura
Röki no es ningún portento gráfico ya que es un juego que podría funcionar perfectamente en generaciones anteriores, además de no presentar muchos componentes en pantalla y las animaciones solo son correctas. Pero Röki no necesita ser ningún portento porque Röki es precioso. Es uno de esos casos difícil de explicar en donde el desarrollo de la aventura está rodeada de un aura mágica y magnética.
La música, por otro lado, sí que resulta irregular, evocadora por momentos y otras veces pasa muy desapercibida, siendo en nuestra opinión el punto más flojo de un juego que es divertido e interesante de principio a fin. Y sobre todo bello.
En cuanto a la duración, en unas 8 u 10 horas (dependiendo de lo audaces que seamos) podemos conocer esta conmovedora historia.
Röki es un juego que va a encantar a los amantes de las aventuras gráficas clásicas y es una puerta de entrada fantástica para aquellos jugadores que no hayan experimentado aún con el género. Sus preciosos paisajes y su historia, que sin duda logra robarnos un cachito de corazón, terminan de redondear un juego muy bien hecho.
