Los británicos de inkle son reconocidos por su narrativa, con novelas visuales muy particulares como Overboard! Ahora han lanzado A Highland Song, una apuesta para ofrecernos el mundo montañés de Escocia de una manera singular, con elementos de deducción y otros componentes rítmicos para complementar su narrativa. Eso sí, llega solo en inglés (el doblaje es muy bueno), por lo que requiere que tengamos cierto nivel para poder disfrutarlo como se merece.
Corre otra vez en A Highland Song
Lo primero que tenemos que tener en cuenta de este son dos factores: el de accesibilidad y el de repetición. Su historia se completa en unas tres horas como mucho, pero hay tantas decisiones que se toman en ciertos momentos que cambian el devenir de nuestra protagonista y que nos llevan a explorar diferentes zonas del escenario (y conocer todas las montañas) que debemos jugar mínimo tres o cuatro partidas para ver gran parte de su espectro. Por su parte, hay buenas medidas de accesibilidad en lo que a pulsaciones se refiere, lo que hace que sea una aventura para todo el mundo (que sepa inglés).
En este juego acompañamos a una chica que va en busca de un faro tras irse de casa, y para ello va a recorrer un mundo montañoso en 2D, pero con capas para ir más o menos cerca de la pantalla. El tiempo pasa, tenemos una barra de cansancio y tenemos que orientarnos en base a mapas que vamos encontrando. Para ello tenemos que ir atinando dónde está cada punto al que hemos de ir y el nombre de las montañas que visitamos.
Además de todo esto, vamos a tener dos momentos más, por llamarlos de alguna manera. Por un lado, conversaciones con otros personajes, y por otro, secciones en las que nuestra protagonista corre a toda velocidad y tenemos que pulsar botones siguiendo el ritmo. Esto último funciona muy bien para los que buscan algo sencillo (como juego de ritmo en sí es mejorable), pero el pilar principal es el de explorar, y se hace de una manera particular que no es para todo el mundo, y que nos obliga a tener que descansar cuando llega la noche y a evitar la lluvia.
Extraño pero con gusto
El problema del juego es que necesita que se junten varios gustos particulares en el jugador para disfrutarlo, destacando sobre todo el de novela visual con apartados de deducción basados en elementos visuales y mapas (y que no se pueden confirmar a no ser que el juego sepa que tenemos un 100% de certeza). Es también la manera de construir el lore del mundo a través de nuestro hacer, pero no es para todo el mundo, y más cuando se mezcla con otros géneros también.
Es a nivel audiovisual donde más destaca esta aventura. Su arte a mano luce muy bien y nos da la sensación de estar en un cuento o libro escrito para el público infantil o juvenil, con colores y trazos muy llamativos. La música es pura reminiscencia a la tradicional escocesa, al igual que ocurre con las voces, por lo que es un apartado muy inmersivo para situarnos en el lugar de la aventura.
A Highland Song es un juego peculiar para un público muy específico. Tiene que gustarnos leer y adivinar acertijos cripticos, tenemos que tener cierto nivel de inglés, que nos gusten las montañas y que tengamos un mínimo de ritmo. Si todo eso se cumple, vamos a pasar un buen rato a lo largo de las diferentes partidas que echemos.
Versión del juego analizada: 1.0.3
