Hace poco tuvimos la suerte de disfrutar en compañía de otros compañeros de prensa de Everybody 1-2 Switch! y así os lo contamos en nuestro avance, donde además dejamos claro que, pese a que no esperábamos hacerlo, nos divertimos de lo lindo. Por desgracia no pudimos jugar usando nuestros móviles, por lo que nos perdimos buena parte de sus minijuegos. Ahora, con una copia del juego proporcionada por Nintendo, podemos confirmar que la diversión no era solo cosa de los Joy-Con.
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Everybody 1-2 Switch! ya está con nosotros y con él la diversión inmediata de los party game. Cambiando bastante de tercio con respecto a lo visto y jugado en el 1-2 Switch original de 2017, ahora nos encontramos ante un título cuya premisa es cuantos más, mejor, aunque también podremos pasarlo bien siendo dos, pero no es lo recomendable.
Hasta 100 jugadores podrán participar en esta fiesta donde una de las mayores novedades respecto a la entrega anterior radica en que en varios de sus minijuegos se podrá usar el teléfono móvil, o se usará de forma obligatoria. En otros, por su parte, solo habrá cabida para los Joy-Con, cuando esto pase, participarán “unicamente” de 2 a 8 jugadores. Decimos unicamente porque cuando toque tirar de smartphone podrá haber hasta 100 contendientes, y funciona bastante bien el experimento. De los 17 minijuegos que hay, 44 con variantes, algunos serán compatibles también con ambos dispositivos, sobre todo los que se basen en controles de movimiento, o el de devolver estrellas ninja, donde varios usan sus móviles y su pantalla táctil y uno utiliza el Joy-Con para devolver estas letales y pequeñas armas arrojadizas.
Esto se traduce en que, al final, cualquiera puede jugar a Everybody 1-2 Switch!, pero este ha perdido la esencia de lo que un día fue la primera entrega. Ahora no va de descubrir las bondades de los pequeños mandos de Nintendo Switch, sino de divertirse en compañía, cuanto más grande, mejor. Por eso también será difícil sacarle todo el jugo, aunque en el momento en que os juntéis unos 8 participantes, las risas estarán aseguradas. Y ojo porque, aunque no tenga modos de juego en línea, como participar con el móvil es tan fácil como escanear un código QR, bien podremos echar unas partidas con nuestro streamer favorito, si se lo propone, aunque con el inevitable lag derivado de estos servicios, no del juego en sí.
Para los demás, para los que juguéis en casa como será lo habitual, os esperan rondas de 20, 40 o 60 minutos, aunque luego es mentira porque el juego, en la modalidad de 20 minutos por ejemplo, hace que gane el primero que llegue a 3 victorias, por lo que igual se acaba todo en la mitad de tiempo. Y aún serían más cortas las rondas si no tuviéramos que tragarnos siempre la explicación del minijuego, que a veces es más larga que el propio juego en sí. Menos mal que todo se ha doblado a la perfección, pero aun así, cansa escuchar siempre lo mismo. También lo hace porque al final son 17 pruebas, ya que las variantes traen escasas variaciones, valga la redundancia. Por ejemplo, en el escondite inglés la variante es que el niño va enfarlopado (juraría yo, lo mismo no), o sea, que es lo mismo, pero más rápido. Mejores son las del minijuego de preguntas y respuestas, donde podremos hacer cuestiones personalizadas e incluso preguntas al vuelo, casi sin pensar. Si os conocéis bien en el grupo, las risas estarán aquí aseguradas (y en el bingo).
En el resto de pruebas habrá un poco de todo, pero bastantes derivadas de juegos de toda la vida, lo cual es bueno. El escondite inglés, la comba, las sillas musicales… Juegos que nos transportarán a nuestra infancia y que siguen funcionando. Otros serán más tecnológicos, y otros dignos de cualquier Wario Ware moderno, pero con una capita más (muy fina) de profundidad. Si bien decíamos que Everybody 1-2 Switch! no iba de descubrir la tecnología detrás de los Joy-Con, eso no quiere decir que no cuente con vibración HD u otras características, como comprobaremos al inflar los globos, por ejemplo. Por cierto, tanto con los mandos como con los móviles el juego se las ingenia para que no hagamos demasiada trampa y no movamos el dispositivo al tuntún, ¿cómo? Tan fácil como haciéndonos poner dos dedos, pulgares en el caso de los móviles, en la pantalla o mando (así saludaremos a los alien como es debido).
Y aunque divierte y mucho cuando estamos acompañados, no podemos evitar notar que le falta algo al juego, y son más minijuegos (y la posibilidad de saltar las explicaciones), además de alguno más imaginativo, con más magia made in Nintendo. 44 suena bien, pero 17, que al final es la realidad, no tanto. Eso sí, hay un par ellos que serán los reyes del sarao, pero a la larga no será suficiente, sobre todo si siempre os juntáis los mismos. Pero para fiestas esporádicas, reuniones familiares, bodas, comuniones, verbenas de pueblo y lo que se os ocurra, Everybody 1-2 Switch! será diversión pura y dura.
