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1-2-Switch

1-2-Switch es el nuevo Wii Sports. La comparación no puede ser más clara, estamos ante ese título que sirve para conocer las posibilidades de la consola mientras se pasa un rato muy divertido en compañía. En esta ocasión los protagonistas son los Joy-Con, aunque también la consola entera tiene su propio minijuego particular.

 

Con 1-2-Switch la diversión está donde tú quieras

Todo en este título comienza con una lista limitada de minijuegos para tener una primera toma de contacto. Una vez se juega a varios de ellos, los veintiocho disponibles se vuelven accesibles, así como la posibilidad de elegir al azar o bien un modo por equipos de dos a veinte jugadores. Siempre va a haber dos que jueguen a la vez, por lo que realmente el límite podría ser infinito. En el modo por equipos se avanza por un tablero y se va compitiendo en distintas pruebas, de forma que las partidas pueden llegar a ser como las de un Mario Party de largas (pero de los nuevos, no los de Hudson).

Pero quitando esas salvedades, principalmente estamos ante un juego en el que se funciona escogiendo una prueba de forma rápida y jugando contra otra persona. Sí, todas las pruebas, a excepción de dos, están orientadas a jugar de forma simultánea contra un rival humano. Los casos individuales son el de mecer y acostar a la consola entera en modo portátil como si fuera un bebé y el de la prueba de comida, ya que utiliza el infrarrojo del Joy-Con derecho. Ambas tienen su gracia, pero no son tan rejugables como las competitivas.

En los duelos hay de todo. Pruebas que están diseñadas para jugar “a lo Wii”, pruebas musicales y pruebas para hacer uso de esa característica de Nintendo Switch que nos han vendido desde el inicio como algo único: la vibración HD. Y sí, llevaban razón, es algo espectacular, pero necesitas probarla para entenderla, aunque 1-2-Switch permite que sea posible explicarla gracias al minijuego de las canicas. En él, nuestro mando representa una caja llena de ellas y, moviéndolo, las canicas que hay en su interior también lo hacen, teniendo que averiguar al final cuántas hay. No importa si aciertas o fallas, al final el juego te permite visualizar las que hay y cómo se mueven mientras tú inclinas el mando, vibrando de forma que acompaña al movimiento de las bolas mientras se desplazan. Pero hay que insistir, es una experiencia que debe ser probada por uno mismo porque no defrauda.

Pruebas rápidas para todos

Pero realmente podemos dividir las pruebas por tipos. Algunas de duelo puro y duro, donde los contrincantes se miran a los ojos en minijuegos como dispararse al estilo Western a la señal de la voz, u otras de espadas y de varitas mágicas. Cada uno tiene su peculiaridad, y animan a revancha. Sirven además para demostrar que los Joy-Con son la evolución natural del Wii Remote Plus.

Hay otras pruebas de competición que van de girar los mandos de diferentes formas. Uno de ellos resulta especialmente curioso porque invita a dejar el mando sobre la mesa, levantarlo, girarlo, y dejarlo de nuevo sobre la mesa, teniendo que hacer giros muy precisos y nada bruscos, demostrando que la detección de movimiento funciona muy bien. Otro sobre giros consiste en deshacer los nudos de las cadenas que rodean a un cofre, indicándose el camino a seguir y, en caso de hacerlo en sentido contrario, la cadena vuelve a colocarse.

Otras pruebas animan a repetir – o no – patrones musicales o de voz, mientras que hay otras que representan deportes de forma sencilla, como béisbol y tenis de mesa. Resulta muy interesante en general que la consola es un intermediario, un elemento que hace de narrador en muchas de las pruebas y que realmente convierte la experiencia en algo más social y de movimiento, de forma que cuando se haga una quedada con amigos la experiencia se centre más en “cómo juegan” mirándolos a ellos que mirando a la pantalla, algo al estilo del original Spin the Bottle de Wii U.

El sonido también juega una parte fundamental en el juego, ya que hay que seguir varios patrones sonoros, ya sea para disparar, golpear o similar. Es una parte fundamental de la experiencia, y ayuda una vez más a que se juegue a la mayoría de los juegos sin mirar a la pantalla, ya sea la del televisor o la de la consola. La pantalla es útil en algunos juegos, como en el de abrir los cofres, pero sobre todo sirve para ver los tutoriales de las distintas pruebas. La primera vez que se escoge una prueba hay que verlo, y luego ya puede omitirse si no se desea volver a visualizarlo. Los vídeos son simpáticos y descriptivos, colocando a personas diferentes mostrando cómo se juega, de forma que la sensación de ridículo por parte de los jugadores se pierda un poco de antemano.

En definitiva, 1-2-Switch es el escaparate de entrada a la nueva consola, con permiso de Zelda. Es la ventana a las posibilidades de los Joy-Con y de la perspectiva multijugador de la consola, además de ser un excelente representante del modelo de “donde quieras, cuando quieras, como quieras” de Nintendo Switch.  Puede haber polémica con su no inclusión en un pack con la consola, pero de lo que no cabe duda es que es una experiencia que debe y merece ser probada. Su formato de pruebas cortas permite partidas muy rápidas y directas, pudiendo llegar a cansar en sesiones de larga duración.

Escrito por
Pikmin de nacimiento y strawhard de corazón, colecciono monedas DK por diversión.

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