Fronzenbyte, los creadores de Trine y Has-been Heroes, no abandona la fantasía y nos trae esta vez a la híbrida de Nintendo Nine Parchments, un juego de acción y RPG que nos hará sacar los magos que llevamos dentro. Descubramos juntos en las próximas líneas la efectividad de sus encantamientos.
En Nine Parchments somos un aprendiz de mago de la Academia, al que, tras un breve tutorial por los pasillos de la escuela para conocer todas las mecánicas del juego, le encargan la misión de recuperar los nueve pergaminos que han salido volando. Para ello contaremos con la gran ayuda de nuestros hechizos.
En busca de los nueve pergaminos
Todos los hechizos tienen un elemento con sus propias debilidades y resistencias, lo que hace que tengamos que planear bien la estrategia de cada combate. Nuestras magias al principio serán un poco débiles como buen novato que somos. A lo largo de la aventura iremos descubriendo nuevos hechizos que nos volverán más letales. Además por cada enemigo que derrotemos ganaremos experiencia con la que obtener puntos para gastar en el árbol de talento de nuestro personaje. Todo esto hace que nuestro personaje progrese con nosotros. No solo somos novatos en el juego, también lo somos nosotros jugándolo y conforme nos volvemos expertos nuestro personaje también lo hace.
La historia de Nine Parchments nos puede llegar a durar unas diez horas. No obstante el coleccionar todos los personajes, subir sus árboles de talento y obtener los sombreros y las varitas pueden multiplicar esas horas en decenas y decenas. Eso sin contar las posibilidades que te da el juego de aumentar su dificultad. En Nine Parchments la dificultad normal ya es “difícil”, algo que se agradece en los tiempos que corren.
Con amigos así nadie necesita enemigos
Pese a que el juego se puede disfrutar solo no es ni la mitad de entretenido que jugarlo con amigos. Nine Parchments se vuelve extremadamente divertido con tres amigos más. El fuego amigo existe, por lo que la primera bola de fuego que te llega hace que instantáneamente te des la vuelta y fulmines con odio al amigo que te la ha lanzado “sin querer”. Estos tipos de piques en el juego harán que pases unas tardes memorables delante de la pantalla con tus amigos. Ya no solo tendrás que estar pendiente de tus enemigos, intentar combinar un hechizo con tus amigos o, una vez más avanzado el juego, intentar evitar la magia superpoderosa y con un área enorme que ha lanzado un amigo se convierte en lo normal.
Por desgracia es muy difícil jugar con amigos en modo portátil ya que la pantalla es demasiado reducida. Eso sí, se puede jugar tanto con el mando Pro, los joycons ensamblados y los joycons por separado, por lo que no necesitarás de mandos adicionales para jugar con un solo amigo. Los controles del juego son muy intuitivos, quizás lo único que se le puede pedir más es la posibilidad de crear atajos para lanzar algunos hechizos, puesto que a veces tardamos demasiado en buscarlo.
Un mundo increíblemente bello
Otro de los puntos más positivos de Nine Parchments es su increíble apartado artístico. Visualmente es una delicia, los paisajes y las tonalidades de colores regalan a los ojos una visión maravillosa de un mundo hermoso. La banda sonora concuerda con esa visión completando una experiencia que es difícil que desagrade a nadie. Posiblemente lo único negativo es la repetición excesiva de los mismos enemigos pero de un elemento distinto. Algo muy natural en los RPGs.
Nine Parchments es la fusión perfecta de belleza y entretenimiento si se juega con más amigos. La historia tiene poca profundidad, pero no es necesaria cuando lo estás pasando tan bien. Si piensas jugar solo te espera un buen juego pero si tienes alguien con quién jugar, enhorabuena, te esperan muchas tardes únicas con esas personas.