Puede que alguna vez hayáis soñado en ser una llama pero quizá no sabéis que, en tal situación, vuestro peor enemigo serían las alpacas. Al menos así lo aseguran desde Chaosmonger Studios con este Speedollama.
Heavy machine gun!
Y es que el sentido del humor queda patente desde los títulos iniciales donde aseguran no haber maltratado a ningún animal durante su desarrollo…a excepción de las alpacas claro. Speedollama pone sobre la mesa un run and gun que bebe en todo momento de nuestro amado Metal Slug, pero en lugar de ofrecer niveles tradicionales nos deja jugar en otros procedimentales. Esto se traduce en 36 niveles… que apenas ofrecen diferencias entre sí.
Una decisión que por lado juega en su contra por la nula variedad de situaciones pero favorece su frenética jugabilidad. En lugar de tener un avance lateral sencillo Speedollama tiene un diseño de niveles más vertical, mapa incluido, por los que movernos libremente con el objetivo de eliminar al menos el 75% de los que pululan por el lugar. Una vez conseguido toca llegar hasta la salida antes de que acabe el tiempo.

Correr, saltar y eliminar a todo lo que se mueva antes de que el crono llegue a cero.
Cruzamos varios mundos y nos enfrentamos a jefes finales también inspirados en la obra de Nazca Corporation pero sin tales niveles de exigencia. Del mismo modo las animaciones, armas y enemigos de a pie recuerdan a situaciones o momentos de aquel. Obviamente el trabajo artístico no alcanza dichas cotas pero se acerca lo suficiente como para reconocerlo en todo momento.
Incluso la clásica voz en off acompañando la recolección de armas está ahí así como los FX al recoger cualquier ítem. Pero Speedollama en realidad es muy diferente. Al contener tantos niveles los enemigos se repiten constantemente, añadiendo nuevos al cambiar de mundo, así como unos escenarios que al final sólo sufren cambios visuales pero no estructurales ni con novedades jugables. Aquí importa la velocidad y ese toque arcade para cumplir el objetivo a tiempo.
Para ello con las monedas recogidas, tras cada pantalla, podemos comprar mejoraras pasivas para el protagonista. Da igual elegir a Chris, Arnold o Lizzy, tenemos tres ranuras para equipar una mayor velocidad de movimiento, mayor vitalidad o mejor tasa de disparo entre otras. Spedollama no busca otra cosa que entretenernos un par de tardes porque la ausencia de mayor profundidad jugable, variedad o de un modo cooperativo que nos haga volver a él reduce recomendarlo más de lo que nos dice su divertida propuesta. Mighty Goose sigue siendo nuestro heredero espiritual favorito de la saga de SNK.
Seguro que el diseño de este enemigo os resulta familiar.
Versión del juego analizada: 1.3.0