Hubo una época en la que las mascotas dominaban la industria del videojuego. No se cuestiona su procedencia ni en muchos casos su calidad pero de entre todas ellas hubo una zarigüeya con armadura y jetpack que no entendía de especies pero sí de hacérnoslo pasar en grande. Y ahora Rocket Knight Adventures: Re-Sparked llega para demostrarlo.
Hasta el infinito…
Por suerte el mundo ha querido que vivamos un nuevo renacer de colecciones de títulos nacidos y disfrutados en décadas pasadas para, por un lado, rejuvenecer muchos de nosotros y, por otro, permitir que nuevos jugadores los descubran por primera vez. Este recopilatorio de Konami incluye los tres juegos del héroe aparecidos en los 16 bits junto a los extras que nos acostumbran estas colecciones: un modo museo repleto de extras y un reproductor musical con los temas de la “trilogía”. Toda una alegría para los que quieran indagar en lo que rodea a estas aventuras de acción lateral.
Porque para los recién llegados la serie Rocket Knight son juegos de acción propios de los 90. El propio Sparkster, el prota de todo esto y que también da nombre a un par de juegos, se mueve a toda velocidad mientras pega espadazos y aparta a los enemigos del camino, incluyendo jefes finales memorables, para después surcar los cielos en niveles de avance automático. Al menos así fue Rocket Knight Adventures lanzado originalmente en Mega Drive, un título que rápidamente captó a jugadores y prensa de todo el mundo allá por 1993. Además se nota el más “verde” en lo gráfico respecto a sus secuelas.
Era cuestión de tiempo ver una secuela y efectivamente un año después la tendríamos por partida doble con juegos totalmente diferentes para Mega Drive y Super Nintendo.
Para dar un poco de tregua a las cosas por el tema de las vidas, repetir niveles hasta la saciedad y demás se han tomado medidas, pero no demasiadas siendo francos. Esta compilación cuenta con un guardado temporal en cualquier momento pero nada de vidas extra o continuaciones infinitas. Quizá se podrían haber estirado más en este sentido ya que muchos jugadores no tendrán la paciencia para enfrentarse a los desafíos que suponían los juegos de antaño. Siempre nos queda la opción adicional Boss Rush para practicar contra los jefes, uno tras otro, y de paso mejorar marcas.
Pero una de las cosas más interesantes de la franquicia es su afán por ofrecer experiencias diferentes con cada entrega. Tras el éxito del primero en la consola de SEGA era cuestión de tiempo ver una secuela y efectivamente un año después la tendríamos por partida doble. Mientras Mega Drive recibió Sparkster: Rocket Knight Adventures 2, su archienemiga SNES haría lo propio con Sparkster. Y como era habitual en la época ambos eran juegos completamente diferentes.
Siempre es maravillo consultar la promoción de aquellos años.
El poder de la bestia
La secuela de MD transformó su lineal desarrollo en algo más plataformero para acercarlo al del popular erizo azul de la máquina. Los saltos hicieron mayor acto de presencia, así como la recolección de gemas, y también un renovado estilo visual que incluso nos puede llegar a recordar al clásico Green Hill de Sonic por saturación de colores y patrones en sus tiles. Incluso parece que las ambientaciones del resto de sus niveles parecen extraídas también de sus juegos.
Pero también en 1994 “El cerebro de la bestia” demostró su superioridad técnica con sprites más grandes, mucho más definidos, repletos de color y un sinfín de efectos gráficos tan característicos de la máquina de Nintendo. Además el desarrollo de Sparkster abrazaba un poco los visto en los otros juegos pero enfatizando el toque arcade y lineal que tan buenos resultados daba por aquel entonces. Parecía una recreativa directamente en el salón de casa con un sonido espectacular que incluso se llevó algunos premios.
Aunque no sea el mejor de la saga hubiera sido un detalle incluir el Rocket Knight de 2010 aparecido en las varias plataformas digitales
Superar cada título incluido en Rocket Knight Adventures: Re-Sparked nos llevará cerca de una hora (algo menos el de SNES) si es que lo conseguimos. Es por esto que echamos en falta algo más donde rascar y aunque no sea el mejor de la saga hubiera sido un detalle incluir el Rocket Knight de 2010 aparecido en las varias plataformas digitales. Una reinvención con gráficos poligonales más plataformera y menos inspirada pero que bien merece un hueco en un recopilatorio como este para conocer de primera mano todas las hazañas de la zarigüeya.
Tenemos filtro CRT para los clasistas, varios marcos para cubrir las franjas negras, cambiar el formato de la pantalla, rebobinado para evitar catástrofes y poder elegir entre las regiones USA y JPN en cada juego (con pequeñas diferencias entre ellas solo para los más fans). No es mucho pero sí suficiente para acompañar todos los extras del Museo con publicidad impresa en revistas, documentos de diseño, los queridos manuales de instrucciones y un “como se hizo” el nuevo video introductorio que pone la guinda al pastel de esta vieja gloria de Konami.
El filtro CRT no puede faltar, así como marcos decorativos.
Versión del juego analizada 1.0.0