Por fin podemos analizar Leisure Suit Larry – Wet Dreams Dry Twice, la esperada continuación de una de las sagas de videojuegos más veteranas e irreverentes de la historia. Fue en 2019, cuando tras años de olvido, apareció en nuestras consolas Leisure Suit Larry – Wet Dreams Don’t Dry, una nueva historia del ligón más famoso del mundo de los videojuegos. Esta nueva entrega volvía recuperar al personaje principal de la saga, un casposo y trasnochado hombrecillo cuyo principal objetivo era acostarse con todo lo que se moviera.
Un viaje por un paraíso terrenal
Nuestra historia comienza justo al finalizar la primera parte, por lo que si no habéis jugado a Leisure Suit Larry – Wet Dream Don’t Dry aconsejamos que no leáis este análisis, puesto que contiene algún spoiler. Con explosión acontecida en la isla de Cancum, Paige desaparece de la vida de Larry, haciendo que este sea completamente infeliz. En su fuero interno sabe que está viva, por lo que no corto ni perezoso decide lanzarse al mar en busca de su amada desaparecida. Con ingenio y mucha suerte, logra arribar a la Isla de Kualu’a, una extraña y paradisíaca isla donde tenemos que buscar a nuestra media naranja… con erótico resultado.
En esta ocasión la jugabilidad es ligeramente diferente a la primera parte, intentando adaptarse al control con un mando. Este cambio en el sistema de juego puede hacer que muchos jugadores se encuentren algo incómodos al principio, ya que hasta que no nos hacemos con los controles vamos a equivocarnos en más de una ocasión a la hora de realizar alguna acción o de interactuar con nuestro inventario.
Leisure Suit Larry – Wet Dreams Dry Twice no es un juego excesivamente difícil, aunque sí que nos va a poner a prueba en numerosas ocasiones. Este título nos anima a pensar de forma lateral, es decir que nos pide que encontremos una solución de la manera más imaginativa posible. Esto es debido a que algunos puzles solo se pueden solventar gracias a una utilización alocada de los diferentes objetos que tenemos en nuestro inventario, así que si no logramos usar bien ese pensamiento lateral, es muy posible que más de un jugador se vea atascado durante la aventura.
Si algo funciona es mejor no tocarlo
El apartado gráfico es exactamente similar al primer juego de la nueva generación. Su estética cartoon nos recuerda en ocasiones a otras aventuras gráficas clásicas, y nos presenta en pantalla ciertos elementos eróticos de forma que no resulta muy soez. No hemos llegado a presenciar ningún tipo de bug ni tampoco una bajada de rendimiento, aunque bien es cierto que este juego no requiere del uso de fuerza bruta para funcionar.
A nivel sonoro, Leisure Suit Larry – Wet Dreams Dry Twice podríamos decir que cumple de forma aceptable. Con una banda sonora de fondo que intenta mezclar la música tropical del Caribe con esa música casposa del cine erótico de los 80 y 90. Quizás su punto fuerte sea el doblaje, ya que aunque está en inglés, es realmente bueno, contando con los mismos actores de la primera entrega de la nueva generación. Eso sí, no hay nada que temer, ya que aunque el doblaje está en inglés, el juego está completamente traducido al castellano, por lo que los jugadores pueden disfrutar al 100% de esta delirante y picantona aventura.
No hemos encontrado ningún tipo de problema a la hora de disfrutar del juego en nuestras Nintendo Switch, ya que como habíamos dicho anteriormente, el juego no necesita de fuerza bruta para funcionar de forma correcta, así que se puede jugar muy bien en modo portátil. Así podréis ayudar al bueno de Larry Lawfer en cualquier lugar sin ningún tipo de problema.
Leisure Suit Larry – Wet Dreams Dry Twice. ¿Segundas partes nunca fueron buenas?
Respondiendo a esta pregunta, podemos asegurar que esta segunda parte es realmente buena, aunque hay que obviar el ligero problema que vamos a encontrar durante los primeros compases con el control. Un juego plagado de chiste picantes y situaciones subidas de tono, el juego nos plantea una aventura muy divertida aunque no apta para todos los públicos.
Recomendamos encarecidamente este juego a los amantes del género, aunque preferiblemente que sean mayores de edad, ya que el juego se encuentra plagado de gran cantidad de representaciones de genitales tanto masculinos como femeninos y hay gran cantidad de chistes y referencias subidos de tono.
