Peasant Knight viene desde el estudio 4A Games en Canadá, y es uno de los últimos juegos que Ratalaika Games ha traído a consolas. El estudio español lleva un ritmo muy bueno lanzando productos pequeños de géneros muy variados, y en cuestión de días os traeremos el análisis de otra de sus adaptaciones, METAGAL.
Peasant Knight contra el malvado brujo
En este juego estamos ante una experiencia en la que nuestro personaje se mueve solo, un auto-runner. Nuestras acciones por lo tanto son aquellas que nos evitan caer en las trampas que hay en nuestro camino hasta la meta de cada nivel, pararnos en seco, o saltar. Todo sería relativamente sencillo si no tuviésemos encima que tardar muy poco para completar cada fase, ya que de otra forma un rayo nos caerá encima y moriremos.
Por lo tanto, el ensayo y error es clave en los ochenta niveles que hay en el juego, pero por fortuna los tramos a repetir siempre son muy breves. Todo ello está envuelto en una narración que nos cuenta la historia sobre un caballero y unos magos tenebrosos que se han llevado a gente de su aldea, pero realmente no supone mucho peso en la aventura de nuestro personaje.
STOP
La gran variedad del juego está en las trampas que tenemos que evitar, y en los mecanimos que hay que utilizar. Pese a lo simple de nuestos movimientos, el uso de todo lo que aparece en el escenario está bien equilibrado para que no haya una excesiva monotonía en el desarrollo. En total hay casi veinte tipos de obstáculos a superar y, por loco que parezca, existe un modo cooperativo para hasta cuatro jugadores para todo el título.
La estética está cuidada, pero es demasiado sencilla. Es decir, los elementos importantes están señalizados, pero el diseño de escenarios, fondos y enemigos resultan muy simples y pueden echarnos para atrás. La música y los efectos funcionan bien, aunque es un título tan visual que todo lo sonoro queda en un segundo plano.
Peasant Knight es una experiencia corta pero intensa. Una vez que se aprenden sus mecánicas es bastante sencillo y realmente nuestro enemigo es el tiempo. Es un juego muy bueno para matar el tiempo, aunque carece de detalles y profundidad para destacar más entre la jungla de la eShop.
