Nuestro análisis de hoy nos devuelve al instituto, con un divertido y picante juego shoot on rails que vuelve remasterizado en su décimo aniversario. Gal Gun Returns nos sumerge en el género bishōjo, con un curioso juego que puede sacarnos un poco los colores. ¿Listos para tratar de conquistar a la chica que nos gusta mientras esquivamos a una horda de jóvenes que se han enamorado de nosotros? Pues acompañadnos, que con suerte y habilidad quizás lo consigamos.
El tiro por la culata
Nuestra historia comienza con una joven aprendiz de Cupido llamada Patako, que debe hacer todo lo posible por ayudar a un joven adolescente que no tiene éxito con las mujeres a conseguir novia. Así, entra en juego Tenzou Motesugi, el desdichado que sufrirá la pequeña metedura de pata de Patako, ya que en lugar de una sola flecha, clavará a nuestro protagonista unas 12, haciéndolo extremadamente atractivo a todas las mujeres del instituto, pero ¿a todas? No, a todas no, ya que habrá 4 mujeres que se resistirán a nuestros encantos, siendo estas el objeto de deseo de nuestro joven estudiante. Así que ni cortos ni perezosos, tendremos que hacer todo lo posible por conseguir su amor.
Para ello, vamos a tener que superar diferentes niveles y algún que otro minijuego que hará que la chica elegida se enamore de nosotros. Todo comienza eligiendo a una de las cuatro protagonistas, haciendo así que tomemos un camino que nos hará que nos topemos con ella y donde tendremos que realizar una serie de acciones y elegir algunas cosas que pueden conseguir que esta se enamore o nos odie, así que hay que tener mucho cuidado con lo que hacemos. Este Gal Gun Returns es un shoot on rails, es decir que vamos a tener que seguir un camino establecido y tendremos que disparar a todas las chicas que se pongan por delante. Aunque no hay nada que temer, ya que no serán balas, sino que lanzaremos disparos de feromonas, que dejarán a las chicas en un estado de éxtasis que nos permitirá escapar de ellas.
Gal Gun Returns no es un juego extremadamente difícil, ya que incluso teniendo dos niveles de dificultad distintos, estos son bastante asequibles para todo tipo de jugadores. Quizás uno de los momentos más difíciles que nos podemos encontrar, más allá de los diferentes minijuegos que nos proponen las chicas elegidas, son los momentos Doki Doki Mode, donde vamos a tener que disparar las feromonas a las chicas de una forma más personalizada, ya que en ese modo nos quedamos a solas con la chica y podemos disparar en cualquier zona de su cuerpo hasta llenar un medidor de satisfacción, que se llenará más o menos dependiendo de la zona en la que disparemos.
Jugando como en un anime
En el apartado gráfico, nos encontramos un juego bastante bien animado y divertido, dándonos la sensación de estar jugando en un capítulo de un anime un poco ecchi, donde nuestra misión es intentar satisfacer a todas las chicas posibles mientras las esquivamos, para así lograr alcanzar y enamorar a nuestra elegida. Aunque esto no será nada fácil, ya que además de los minijuegos que nos proponen, también vamos a tener que lidiar con unos guardianes que las protegen, y que harán que sea más difícil enamorarlas.
En el aspecto sonoro es donde más podemos llegar a sonrojarnos un poco, ya que si bien no tenemos una banda sonora espectacular, el juego cuenta con unos efectos sonoros que es mejor que no escuche nadie a nuestro alrededor, ya que el juego tiene un constante gemir de placer de las chicas del instituto. Así que aconsejamos a cualquiera que juegue a Gal Gun Returns que lo haga con un audio moderado.
Este titulo no cuenta con ninguna característica especial en Nintendo Switch, algo que nos da un poco de pena, ya que el giroscopio habría sido un gran acierto en esta consola si dijéramos de jugarlo en modo portátil.
Gal Gun Returns, una aprendiz de Cupido algo patosa
Para acabar, debemos aclarar que este no es un juego para todo el público, así que mucho ojo a aquellos padres que decidan comprárselo a un niño pequeño, ya que incluso para un jugador adulto, hay algunos momentos del juego que pueden llegar a parecernos un poco excesivos. Aunque eso sí, Gal Gun Returns no es en ningún momento un juego pornográfico, a lo sumo es algo erótico, aunque no muestran absolutamente nada.
Puede que algún jugador fan de los shoot on rails lo encuentre divertido e incluso desafiante, pero si cree que la temática que ambienta el juego es excesiva para él, no va a disfrutar en absoluto este curioso título.