Nintendo Classic Mini: Nintendo Entertainment System (de ahora en adelante, NES Mini) es una de las apuestas de la compañía nipona para estas navidades, ofreciendo 30 juegos en un paquete para recrear la experiencia de la gran máquina de hace tres décadas. No hay cartuchos y la posibilidad de añadir más juegos está, de momento, descartada, pero el lote de juegos ofrecidos cubre gran parte de las glorias de la primera gran consola de Nintendo.
Una bonita réplica adaptada al presente
La caja de NES Mini es pequeña, como viene siendo habitual en consolas Nintendo tras la época de Nintendo 3DS XL. Dentro, en un cartón y sus respectivos plásticos protectores, vienen la consola, un mando, un cable HDMI y un cable de alimentación USB. Además se incluye un pequeño manual sobre los clásicos avisos de salud y seguridad y una explicación leve de puertos y botones. Además, volviendo al factor nostalgia (aunque más reciente), se incluye una tarjeta con un código para canjear por 300 puntos de platino de MyNintendo. Ahora, es el momento de analizar uno por uno todos sus componentes.
La consola es una réplica en miniatura del modelo que llegó a Europa, idéntica en todos sus aspectos salvo el relativo a salidas de mandos y puertos. El material es resistente y, sorprendentemente, es mucho más ligera de lo que parece. Quizás podría ser más pequeña, pero de esta forma está más protegida y puede presentar su nostálgico diseño. En total tiene dos botones, dos puertos delanteros para mandos y dos traseros para conectar la consola. El primero de los botones, Power, es el encargado de encender y apagar la consola, quedándose hundido mientras se encuentra encendida, algo que también se muestra con una pequeña luz roja a su lado. El segundo botón, Reset, puede ser pulsado para salir de una partida en cualquier momento para volver al menú de la consola (pudiendo realizar en ese momento diversas acciones).
Las conexiones de NES Mini para mandos son idénticas a la que tiene el Wii Remote para insertarle un Nunchuk. Es por ello que todos los Mandos Clásicos son compatibles con la consola, sean la versión de SNES, el estándar o el Pro. En la parte trasera, tiene el puerto HDMI para conectarse a los televisores de alta definición y su entrada para el cable de alimentación USB. Lo bueno es que el mismo televisor puede abastecer de corriente a la máquina, pero en caso de querer enchufarlo a la corriente tocaría buscar por cuenta propia un adaptador USB-enchufe. Eso sí, al ser tanto el HDMI como el cable de alimentación USB estándares usados en otros aparatos, la posibilidad de tener un recambio a mano o bien alguno de diferente longitud en cualquier lugar es altísima.
Ahora, el mando. Salvo pequeños detalles como la conexión u otros mínimos poco perceptibles, el controlador de NES Mini es una copia exacta del control original, por lo que el factor retro es inevitable al poder tener en nuestras manos “lo mismo” que se utilizaba en su momento, y no un mando actual. Su gran problema es la longitud del cable, algo más corta que la del Mando Clásico, haciendo que en general haya que estar muy cerca de la máquina (o bien comprar algún tipo de alargador) para no tener problemas. Cabe destacar que en caso de utilizar un Mando Clásico de Wii se ofrece una funcionalidad extra: la del botón Home. Pulsándolo ocurre exactamente lo mismo que al pulsar el botón Reset de la consola, por lo que con este tipo de mandos no hace falta acercarse a la consola para volver al menú.
El uso de la misma conexión que la del Wii Remote para los mandos permite que de cara al multijugador en NES Mini se puedan utilizar diversos controles, y no tener la necesidad de comprar otro. Pero también es algo que tiene un factor a la inversa, pudiendo utilizar el controlador de esta máquina en todos los juegos que sean compatibles con el Mando Clásico en Wii y Wii U (aunque hay que tener cuidado con la cantidad de botones que usa el título en cuestión). De esta forma, se puede disfrutar de títulos como Shovel Knight con un control que, por diseño del juego, le encaja bastante bien.
NES Mini: 30 juegos, 60 hercios
En cuanto a la lista de juegos presente, que al fin y al cabo es lo más interesante, esta versión de la Nintendo Entertainment System cuenta con 30 títulos instalados en la memoria de la máquina, que son los siguientes:
- Balloon Fight
- Bubble Bobble
- Castlevania
- Castlevania II: Simon’s Quest
- Donkey Kong
- Donkey Kong Jr.
- Double Dragon II: The Revenge
- Mario
- Excitebike
- Final Fantasy
- Galaga
- Ghosts ‘n Goblins
- Gradius
- Ice Climbers
- Kid Icarus
- Kirby’s Adventure
- Mega Man 2
- Metroid
- Mario Bros.
- Ninja Gaiden
- Pac-Man
- Punch-Out!! Featuring Mr. Dream
- Star Tropics
- Super C
- Super Mario Bros.
- Super Mario Bros. 2
- Super Mario Bros. 3
- Tecmo Bowl
- The Legend of Zelda
- Zelda II: The Adventure of Link
Los juegos clásicos que incluye NES Mini se pueden jugar con alta definición a 60Hz en cualquier televisor moderno ya que se conecta mediante HDMI, algo que en la época de la consola original no existía, pero que es casi imprescindible en cualquier televisor actual. El tema de los 60hz se nota y mucho, ya que en la época los títulos de NES se movían a 50hz y al menos en Europa hasta la época de Nintendo Gamecube no tuvimos los 60Hz, en la que sólo en algunos juegos se daba la posibilidad de arrancarlo en 60hz. Por lo tanto, en NES Mini los juegos van considerablemente más rápidos y fluidos, algo que los hace algo más difíciles, como también se nota en las versiones de títulos de Super Nintendo para la consola virtual de New Nintendo 3DS. Lo más notable de todo esto sin duda es que los juegos ya no van “a saltos”.
Sobre el multijugador, algo excelente para revivir junto a otra persona los clásicos incluidos en la máquina, hay que destacar que permanece exactamente igual que el de su época. Por lo tanto, hay casos que ofrecen dos jugadores de forma simultánea, como Mario Bros, mientras que hay otros que utilizan un sistema de turnos entre jugadores como Pac-Man.
Esta nueva consola tiene varias configuraciones posibles en cuanto a la resolución, podemos seleccionar el modo “Televisor antiguo” y así jugar como si tuviesemos delante un televisor de tubo, es decir, con líneas visibles en mitad de la pantalla. En el modo “Resolución original” (Pixel Perfect) jugaremos con la resolución original de la NES con franjas negras a los lados de la pantalla. Por último, el modo 4:3 estirará la imagen en horizontal para adaptarse algo más a las dimensiones de los televisores modernos. Puede parecer que en este último modo todos los píxeles se estirarán perdiendo nitidez, pero la verdad, el resultado es mejor del que podría parecer.
La resolución no es lo único configurable en el menú de opciones, también podremos activar o desactivar salvapantallas, apagado automático y una demo automática de los juegos si se deja la consola en el menú durante unos instantes. También hay opciones para elegir el idioma entre inglés, italiano, francés, neerlandés, alemán, portugués, español y ruso e incluso resetear la consola y volverla nueva de fábrica. Los manuales de los juegos no vienen integrados en la consola, solamente se ofrece un QR y un enlace para acceder a ellos.
El menú, similar al de Super Mario All Stars, permite acceder a todos los juegos – y ordenarlos según varios criterios – además de a las opciones comentadas anteriormente. El botón Reset, que en la época de NES servía para reiniciar la consola, sirve ahora para volver al menú de selección de juego mientras se está en una partida y realizar de paso las nuevas posibilidades que ofrece esta nueva máquina, los Save States. Una vez que se vuelve al menú se pueden guardar hasta cuatro de ellos por juego seleccionando una de las ranuras de guardado en la parte de abajo del menú. Volver al menú permite de paso navegar por éste y cambiar las opciones de configuración con la partida en un segundo plano, una mejora realmente cómoda. Por su parte, los juegos en los que se podía guardar la partida en la época siguen manteniendo dicha función.
Como último detalle informativo, el código fuente del sistema operativo de NES Mini ha sido publicado para que todo el mundo tenga acceso a él. Encontraréis más información aquí.
Valoración de Gaizka Iruretagoyena (Everdred)
Me ha sorprendido y mucho la nueva máquina, o nueva versión de la NES como se prefiera llamar. Da gusto jugar con esta diminuta consola, los 60hz y la imagen en HD son un gustazo. Hemos tardado muchos años en recibir una consola clásica adaptada a los tiempos de manera oficial y espero que sea la primera de muchas, estaría encantado de jugar a los juegos de Gameboy o a los de Super Nintendo en HD, a 60Hz y con el mando original de la época. Se juega de maravilla en una televisión full HD y va muy fluido, sin saltos ni nada. Además, es tan pequeña que se puede colocar en cualquier lugar, o, se debería poder, ya que os recomiendo no dejarla muy lejos de vosotros, sino el cable del mando no os va a llegar. Sí, es horrorosamente corto, y sinceramente, es la única pega del producto. A mí me faltan algunos juegos en su catálogo, como, por ejemplo, el Tetris o algún Mega Man, es una pena que sean sólo 30, que no son pocos vaya, está realmente bien, casi sale a precio de consola virtual y siendo Nintendo como es, mejor agradecer los que trae.
Seamos sinceros, a la NES Mini vamos a jugar más bien poco. Es un producto práctico, sobre todo para jugar a los títulos que incluye, pero al estar limitada en cantidad de juegos, sí, para jugar a los que trae es una opción mucho mejor que la consola original, se enchufa fácil, ocupa poco y tiene mejor resolución, 60Hz y Save States. Para los juegos no incluidos no queda otra que usar la consola original. Tanto para los incluidos como para los no incluidos, está la consola virtual de Nintendo 3DS, que además es una consola portátil. Tenemos varios sitios donde jugar al mismo juego y la verdad es que NES Mini se puede llevar a cualquier lugar ya que apenas pesa y no abulta, pero como dije antes, preveo que se va a recordar como un producto de coleccionismo y se va a considerar un elemento precioso de decoración más que una consola de juego, pero en el fondo, siempre estará ahí para echar una partida de vez en cuando sólo o en compañía.
Valoración de Javier Aranda (Bier_hylian)
Con Nintendo Classic Mini: Nintendo Entertainment System Nintendo ha traído de vuelta, de nuevo, a antiguos jugadores ante los mandos de una consola que es, ni más ni menos, que aquella que triunfó hace varias décadas pero con más añadidos. Quizás se puedan echar en falta más títulos, o bien la opción de poder ampliar el catálogo interno de la consola previo pago, sobre todo para completar sagas que tienen representación con algunas de sus entregas, como Mega Man, Castlevania o Ninja Gaiden. Sin embargo, el catálogo final resulta variado y de calidad, teniendo seguramente en sus listas algún juego que cualquier jugador puede considerar emblemático.
NES Mini es, además, el “amiibo de NES”. Es decir, una pieza pequeña que puede colocarse en la estantería u otro lugar similar para decoración, a la par que tiene capacidades de juego (30 juegos completos ni más ni menos en este caso). Es por esto que ahora la gente no para de pedir o hablar sobre cómo continuar la colección, es decir, ver consolas como SNES y Nintendo 64 en este formato también. También está la opción de importar la FAMICOM Mini para tenerla como acompañante de la versión europea.
Respecto al producto en sí, es algo cargado de valor sentimental, pero que puede no satisfacer a cualquiera. Habrá quien no quiera (según ellos) el refrito de nuevo, quien tenga ya la mayoría de los títulos en la consola virtual y no vea interesante su compra o al que le pese la sensación de incompleto porque le sepa a poco el catálogo escogido. Por otro lado, habrá jugadores que han estado esquivando las compras digitales de estos juegos y se encuentren ahora ante una oportunidad única, otros que quieren volver a jugar a la consola con la que disfrutaron hace años y, por último, los coleccionistas. Está claro que hay aspectos mejorables, sobre todo en tema de cables, pero en líneas generales se ve que se ha cuidado la presentación bastante.
A modo de conclusión final, sobre el impacto de este lanzamiento. En plena época de transición y de dejar el nombre Wii atrás, Nintendo ha vuelto a poner su nombre en la boca de todos. Con este movimiento vuelve ahora, en sobremesa, el “jugar a la Nintendo”, algo que se quiere recuperar de cara al futuro lanzamiento de Switch e incluso de otras máquinas futuras. En definitiva, este lanzamiento ha satisfecho a nostálgicos, supone una gran jugada de marketing y, de paso, se convierte en un regalo perfecto para navidades. No será una consola que se tenga permanentemente enchufada, pero por su diseño puede montarse en segundos para jugar cuando haya uno que esté ante uno de esos momentos en los que se piensa “los juegos de antes molaban”.