¿Qué es Layers of Fear: Legacy? Se trata de la versión Deluxe o GOTY del título de terror que ya pasó por otras plataformas cosechando buenas críticas, añadiendo el DLC Inheritance en el paquete. Incluye además pequeños detalles para los amantes del control de movimiento si usamos los Joy-Con por separado, permitiéndonos por ejemplo abrir puertas y cajones realizando el gesto que haríamos una vez cogido el pomo.
Un cuadro dibujado en layers of fear
En una mansión llena de obras de diferentes pinturas de autores de renombre vive un artista que, tras realizar varios tabajos, cae en la locura mientras está en el proceso de realizar un retrato de su esposa. Un viaje a través de nuestro hogar y nuestra cordura nos van a atrapar durante unas tres o cuatro horas en la historia principal y una más en Inheritance, aunque hay varios coleccionables y tres distintos finales que pueden invitar a los “completacionistas” a echarle un par de rondas más.
La exploración se da completamente en primera persona, sin ningún arma a nuestro alcance y sin que haya enemigos. Sin embargo, pequeños puzles nos esperan y, sobre todo, muchas raciones de exploración (pese a ser bastante lineal, querremos abrir cajones e investigar en busca de documentos y coleccionables) y bastantes sustos. Nunca iremos con la sensación de que podemos morir y que toca reiniciar una sección, pero la tensión nos tiene atrapados por otros motivos. Cada habitación es un mundo distinto a la anterior, y un solo giro de pantalla puede llegar incluso a cambiar su distribución o añadir detalles que no estaban antes.
La ambientación está muy bien conseguida y nos invita a seguir explorando más y más la mansión; es más, seguramente si acabamos enganchados nos lo fundamos de una pasada. Eso sí, hay ciertos elementos que hacen que se pierda el factor sorpresa del que presume en otras ocasiones, y es que pasamos por habitaciones que se repiten (algunas de ellas vacías) o por secciones que insisten en el mismo truco para asustarnos.
La locura del artista
Nuestro personaje poco a poco irá terminando su obra, no sin antes pasar por más de un infierno mental. Su situación tampoco es la más adecuada, pues la cojera que padece hará que cuando corramos notemos un movimiento un tanto irregular. La perspectiva cambia en Inheritance, que nos sitúa en los ojos de la hija del protagonista de la historia principal, con todas las limitaciones que supone ser una niña pequeña en una enorme mansión en la que habita lo sobrenatural.
El factor de tensión nos tiene en vilo durante todo el juego, habiendo un buen ritmo entre momentos más calmados y otros en los que empiezan a pasar cosas extrañas sin parar. Además, es una de esas experiencias que permiten sumergirnos en ella si optamos por auriculares y modo portátil (en el que rinde igual de bien) o bien en otro modo ya sea aprovechando o no el movimiento del Joy-Con y permitiendo así “compartir” la experiencia con otras personas.
Layers of Fear a nivel técnico no luce nada mal, con tonos oscuros, “sucios” y sangrientos por doquier que representan perfectamente el estado de la casa y de la cabeza del personaje. La música a veces no está (porque es necesario) y a veces está muy presente; y cuando lo hace, está muy bien. Respecto al rendimiento, no hay ningún tipo de bajón ni problema similar y además, una vez que ha empezado la partida rtas la carga inicial, podemos contar con los dedos de una mano las ocasiones en las que el juego necesita un mínimo tiempo de carga.
Layers of Fear: Legacy es un título de terror en primera persona de los que se han puesto enormemente de moda en los últimos años pero que no se queda en uno del montón. Tiene cosas con cierta inspiración en otros juegos, como la cordura de Eternal Darkness, y otros algo más propios que crean en definitiva un buen conjunto para los amantes de los thriller psicológicos. Sin embargo, le pesan algunos aspectos que juegan en su contra pero que podrían ser fácilmente pasables por alto ante un ojo menos crítico.
