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L.A. Noire

Nintendo Switch ha sido una sopresa para todos, usuarios y compañías, algo que poco a poco se está haciendo presente con numerosos anuncios de sagas que no han pisado una consola de la compañía en unos cuantos años. Uno de estos anuncios ha sido L. A. Noire, que llega a la híbrida de Nintendo con todo el DLC de la versión original y añadidos para aprovechar los distintos tipos de control de la máquina.

Casos por descifrar en todos los puestos de la policía

Hay veces en las que los videojuegos y el cine se comparan, ya sea por su narrativa o banda sonora. En este caso, la relación podría ir más allá, y es que no se puede hablar de L.A. Noire sin mencionar su impresionante sistema de animaciones faciales. La interpretación de los actores está captada en todo el rostro de una manera soberbia, con una sincronización labial de 10 y encima todo esto tiene importancia en la jugabilidad. ¿Cómo? Todas esas expresiones en los personajes nos reflejarán su seguridad al hablar o la falta de contacto visual, que pueden llegar a ser síntomas de estar mintiendo.

Tras este halago (necesario) introducimos el universo del título. Estamos en la década de 1940 y se ha terminado la II Guerra Mundial, momento en el que Estados Unidos gana un protagonismo en todo el mundo. Sin embargo, real como la vida misma, los crímenes en el país están a la orden del día, y será nuestro papel atrapar a los criminales como miembros de la policía, escalando desde lo más bajo del cuerpo. Sin embargo, las habilidades que nos llevarán a nuestro ascenso meteórico están más que justificadas, puesto que nuestro protagonista, el meticuloso Code Phelps, fue soldado en el conflicto bélico citado anteriormente.

Toda la historia está narrada en forma de capítulos como si fuese una serie policiaca de televisión, de forma que estamos ante distintos casos que terminan con el culpable identificado. Al comienzo serán más cortos y buenos compañeros para iniciarnos en todas las mecánicas del título de una manera continuada, pero luego ganan en profundidad, con escenarios más complejos y más pruebas que recolectar. Además, secuencias de cine negro y diversos flashbacks de nuestro personaje nos servirán para hilar una historia en conjunto y darle mayor trasfondo argumental a cada caso al que nos enfrentemos.

L.A. Noire, reflejo de los estadounidenses de los 40

Estamos ante una época en la que la gente fumaba tabaco en todas partes, en el que no todo el mundo tenía un arma, con los sistemas de comunicación limitados y sin las bases de datos de la policía que tenemos hoy día. Es por ello que aspectos como los números de serie de las pistolas, las facturas, los registros y cualquier cosa tangible que pudiera encontrarse era una prueba vital para vincular a una persona con un asesinato u otro crimen.

La violencia y la moral están en juego todo el tiempo, no en vano es un juego PEGI +18. Vamos a presenciar sangre y muertes por doquier, y personajes que van a hacer todo lo posible por salirse con la suya u ocultar su implicación en cualquier acto, pero también vamos a ver corrupción y desobediencia a los superiores, teniendo así un cóctel de representados que hacen que la experiencia sea más pareja, por desgracia, a la realidad.

La ambientación está cuidada al detalle, con una gran cantidad de referencias al cine clásico, incluso con la opción de poner el juego en blanco y negro por si queremos sentir incluso más todavía la época representada. Tenemos presentes distintos momentos en el desarrollo del juego: movimientos en coche, tiroteos, persecuciones, combates a puñetazos, investigaciones e interrogatorios; todos los componentes para tener nuestra serie interactiva.

Muertes en blanco y negro

Las secciones más violentas, es decir, las de tiroteos, combates cuerpo a cuerpo y persecuciones funcionan como en un juego de acción con coberturas. Cuando perseguimos a un criminal – o grupo de ellos – que van armados, debemos de usar el escenario para colocarlos apropiadamente y disparar para eliminarlos. Es interesante ver elementos del escenario destrozarse con nuestros disparos, pero realmente estos momentos se nota que no están del todo trabajados, y no por fallos, sino porque se nota que son aspectos complementarios más que una parte importante del desarrollo.

Lo mismo podemos decir de las persecuciones. Destacan mucho en algunos momentos, como cuando un criminal te pisa la cabeza mientras subes unas escaleras, pero son momentos más lineales y quizás algo prescindibles. Los combates a puño limpio, basados en esquiva y contra-ataque a lo Punch-Out!! son simples también, pero tienen algo más de gracia. Sin embargo, a pesar de que todo esto tenga un nivel de profundidad menor que el de las partes más pausadas, son elementos que resultan muy interesantes porque nos ayudan a meternos más en la piel del protagonista viendo todo a lo que él, como policía, tiene que enfrentarse.

Las escenas de coche, con su mapa incluído, resultarán familiares a todos aquellos jugadores de la saga por excelencia de Rockstar, GTA. Pese a que principalmente servirán para ir de un punto A a otro B, la ciudad tiene sus localizaciones y nosotros debemos elegir al lugar al que vamos entre diversas posibilidades según lo que hayamos apuntado en nuestro diario del caso. Y si tenemos la orientación un tanto floja utilizando el mapa, siempre podemos pulsar un botón para que nuestro compañero nos haga de GPS.

Expresiones faciales de película

Existe una opción para que nuestro compañero coja el vehículo por nosotros, pero es totalmente desaconsejada. No es que la jugabilidad al volante sea una maravilla, pero si nosotros estamos conduciendo podremos recibir avisos de radio y así aceptar las diversas misiones secundarias que nos esperan en función del departamento de policía en el que estemos. Además, hay un expositor de vehículos en el menú del juego para ver todos los modelos de coche que hemos conducido, por lo que habrá que montarse al volante (aunque sea un instante) para extender la galería.

Ahora, la chicha buena, los interrogatorios y las investigaciones. En los primeros nos encontraremos en momentos en los que nos podremos sentir Phoenix Wright a través de tres posibilidades en las conversaciones: Ser Poli bueno, Poli Malo o Acusar. Lo último no implica que digamos que es culpable, sino que tenemos una prueba que demuestra que está mintiendo, por lo que es la opción más apropiada en caso de disponer de material. Sin embargo, las otras dos pueden tener su interés en más de una ocasión, aunque mal llevadas pueden hacer que se pierda información y toque reiniciar o bien avanzar en el caso con falta de información.

Y las partes de investigación, aquellas que hacen que llamar a L.A. Noire aventura gráfica tenga sentido, son otro elemento muy bien trasladado al mundo del videojuego. Gracias al HD Rumble y la música de fondo sabemos la ubicación del meollo principal para buscar pruebas, pero eso no quita que tengamos libertad con otros sitios y objetos, teniendo la posibilidad de coger varios de ellos y analizarlos con detalle por si tienen algún elemento de interés. Todo ello como buen policía y con nuestro compañero haciendo los comentarios oportunos todo el tiempo. Estos momentos son los principales para la resolución de casos, rellenar el diario y encontrar información y pruebas para poder acusar a alguien o encontrar una ubicación para ir con el coche. Queda con esto muy presente lo ya comentado: el bloque fundamental, investigaciones e interrogatorios, está a otro nivel respecto a los momentos complementarios.

Investiga en modo sobremesa, portátil o en el dock

Sin embargo, entre tanto halago, hay que saber leer entre líneas. Fans de Rockstar, esto no es GTA. Y puede que sea una tontería decirlo, pero como hemos comentado, la búsqueda y el diálogo son los protagonistas de L.A. Noire en lugar de las escenas de acción o conducción, y eso debe quedar claro para evitar una depeción (en mi caso más bien es una alegría). Por otra parte, los interrogatorios pueden darnos algún quebradero de cabeza al elegir la opción inadecuada, obligándonos en más de una ocasión a reintentarlo por un fracaso.

Hemos alabado la ambientación, pero es momento de hablar del juego en rendimiento técnico. Hablamos de estabilidad en gran parte del desarrollo del juego (las caídas y el popping en escenarios muy abiertos están ahí), tiempos de carga presentes pero no demasiado elevados y en el diseño de personajes y escenarios. Se nota que estamos ante un título revisitado, con aspectos como los cabellos o algunos elementos de diseño propios de hace unos años, pero por otro lado, el sistema de expresiones ya mencionado y la representación de la ciudad están trasladadas perfectamente. La música es un complemento a todo lo oscuro y negro del juego y, sin tener tampoco una excelente banda sonora, cumple con creces la labor de ambientarnos todavía más.

La versión de Nintendo Switch cuenta con controles adaptados a los diferentes modos de usar la consola. Por un lado, los Joy-Con y su movimiento permiten tener una forma diferente de mover la cámara, analizar objetos, avanzar por ficheros o apuntar con nuestro arma en las fases de tiroteo. La pantalla táctil, por su parte, permite manejar todo, movimiento inlcuido, sin utilizar ningún botón, dándole más sentido a la afirmación de todos aquellos que califican este juego como aventura gráfica. Sin embargo, para los más tradicionales, la opción de usar Joy-Con sin movimiento o el Pro Controller está presente, por lo que en cualquier momento puede cambiarse a la opción de control preferida desde el menú o incluso tener varias de ellas activas al mismo tiempo.

¿Qué podemos decir de L.A. Noire en conclusión? Podemos definirlo como una aventura gráfica, pero me gusta más llamarlo simulador de policía. Pese a que no es excelente en todos sus apartados, sabe brillar en su conjunto y resulta una propuesta única y que atrae, atrapando al jugador en sus 25 horas (aproximadas) de juego. Además, su puesta en escena en la captura de movimientos es un aspecto que no suele verse a menudo y que consigue atraparte desde el primer diálogo.

Nota importante: Si quieres la versión física del juego, prepara 13,1 GB de tu microSD/disco duro para una descarga para tener el juego al nivel óptimo de rendimiento y detalles.

Escrito por
Pikmin de nacimiento y strawhard de corazón, colecciono monedas DK por diversión.

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