Alblune ya nos conquistó con su particular Spirit and the Mouse, y esta vez vuelven con roedores, pero con un enfoque muy distinto. Squeakross: Home Squeak Home, su nuevo juego, es un título centrado en los nanogramas/pictogramas (archiconocidos por la serie Picross) que apuesta por hacer la fórmula más accesible, ofrecer algo más allá de los puzles y, de paso, poner el foco en criaturas tan adorables pero tan injustamente repudiadas como las ratas.
Squeakross es un catálogo de Ikea jugable
Lo primero de todo que tenemos que hacer en este título es crearnos nuestra mascota virtual, una rata a la que podemos llamar como queramos, darle rasgos de personalidad y formarla con un editor muy completo que nos permite hacer auténticas locuras casi al estilo del editor de los Mii. Si no tenemos preferencia alguna, podemos optar por usar un nombre y/o diseño generado aleatoriamente (que luego podemos editar si nos apetece posteriormente).
Tras esa edición inicial, se nos ofrece una casa, aunque de inicio solo constará de una habitación y posteriormente irá ampliándose hasta tener un máximo de 5. Nuestro objetivo es, por tanto, decorar la casa para que nuestro amigo peludito viva muy feliz. Y para conseguir los elementos decorativos, tenemos que realizar puzles. Sí, nanogramas de esos que se hacen marcando casillas en función de los datos que nos indican los números que hay en las columnas y las filas. Si nunca habéis jugado a un título así, no os preocupéis, se lo decís al juego y os ofrece uno de los tutoriales más completos que hay para este tipo de puzles, de manera que vais a entenderlo todo en cuestión de minutos.
En total nos esperan 650 puzles para tener un total de 325 objetos con los que no solo decorar la casa, sino también “vestir” a nuestro simpático amigo. La otra mitad de los puzles está destinada a ofrecer variantes de color de los objetos ya obtenidos, además de la posibilidad de poder colocar más de uno en la casa. No podemos acceder a todos los puzles de inicio, pero si que se van desbloqueando con bastante margen por si queremos ir a lo que nos interese para decoración primero.
Múltiples opciones
En cuanto a los puzles, podemos activar o desactivar varias opciones, como que aparezca el contador de tiempo, que se nos avise si lo hemos hecho mal, que se marquen con X las casillas vacías de las filas o columnas que ya hemos rellenado correctamente o incluso algunas opciones de visualización. Esto hace que se convierta en una experiencia que puede ser intensa y medida para los más fanáticos o bien muy relajada para el que busque lo contrario. Además, no hay penalizaciones para conseguir los objetos si tardamos mucho o cometemos algún error, por lo que el nivel de desafío se lo marca cada jugador.
Por su parte, fuera de los desafíos mentales, podemos hacer que nuestro roedor interactúe con cualquier objeto que haya en la casa, cambiar de habitación (a la que nosotros le llevemos) y podemos ver cómo reacciona a todo: a veces se asusta, a veces se echa a dormir, otras veces se pone contento y a cantar y, mientras no le indicamos nada y no se acerque a ningún lugar, hará lo que suele hacer su especie: limpiarse muy bien y ocasionalmente comer.
Esta parte de diseño y simulación viene acompañada también de varios correos que van apareciendo ocasionalmente, para contarnos cosas sobre el juego, algunos correos de Spam muy bien creados e información sobre las ratas, para que comprendamos mejor a esta especie tan inteligente y que tanto nos ha aportado científicamente. Así que entre lote de puzles, tenemos muchas cosas que hacer para poder relajarnos y tomarnos un respiro y, pese a que realmente no es una parte muy compleja, observar a la pequeña por la casa da paz.
Squeakross es un juego que te ofrece la experiencia de nanogramas al gusto, y una de las experiencias del género mejor diseñadas. Pero no hay una sensación de riesgo y de velocidad si no quieres que la haya, y eso lo convierte en uno de los títulos que mejor funciona para introducirse en este tipo de puzles (y también sabe complacer al fan más acérrimo). Todo lo demás añadido le da un sentido a los pictogramas realizados, y encima le da amor a las ratas.
Versión del juego analizada: Nintendo Switch (1.0c1)
