Don’t Die, Mr Robot DX, desarrollado por Digerati, es uno de esos juegos arcade a la vieja usanza, tan simples como efectivos, que nos harán invertir una gran cantidad de horas simplemente por el placer de superarnos a nosotros mismos. Tiene todos los elementos necesarios para triunfar dentro del género y, sin embargo, ¿realmente es suficiente con eso?
Don’t Die, Mr Robot DX y el regreso a los arcade más clásicos
En Don’t Die, Mr Robot DX somos un cuadrado, supuestamente robótico, y tenemos que evitar se golpeados por las hordas de enemigos que quieren destruirnos. Si nos golpean, se acaba la partida. No podemos movernos más allá de los límites de la pantalla, y de estos límites aparecerán, previo aviso, las diferentes amenazas que hemos de sortear.
Por suerte, nuestro robot es capaz de generar una onda expansiva cada vez que come una fruta (sí, yo también puse esa cara WTF-iense) mediante la cual puede destruir al 90% de sus enemigos. Estos enemigos sueltan monedas que más tarde podemos emplear en la tienda para comprar mejoras para el robot.
Entre las mejoras disponibles, tenemos un aumento de la potencia de las ondas expansivas y un escudo que nos permite aguantar más de un golpe. El problema es que estas mejoras no se pueden emplear en todos los modos de juego.
Entre los distintos modos de juego tenemos el modo aventura, el principal en el cual hemos de superar una serie de desafíos concretos. Dada la naturaleza de este modo, las mejoras están desactivadas.
La dificultad va aumentando de forma progresiva y habrá que obtener una serie de medallas, según nuestro grado de éxito al completar el desafío, para poder desbloquear los niveles sucesivos.
El resto de modos son de tipo infinito. Presenta un modo arcade normal, de tipo supervivencia, y un modo relajado, que es como el modo arcade pero más fácil.
Así pues, simplemente desplazando a nuestro robot por la pantalla, Don’t Die, Mr Robot DX ofrece una gran variedad de modos y promete horas de diversión. El juego no tiene más que esto, lo cual puede ser suficiente para unos o escaso para otros.
Aparte, se pueden desbloquear diferentes personajes, que ofrecen una forma diferente de afrontar los distintos desafíos del juego, lo que alarga la vida de Don’t Die, Mr Robot DX. No obstante, esto no impide que el título desprenda al poco tiempo una cierta sensación de monotonía, que comentaremos más adelante, y que va a ser el peor enemigo de la creación de Digerati.
Visto y no visto
Desde el punto visual, Don’t Die, Mr Robot DX es básico hasta decir basta. El diseño de los personajes, objetos y enemigos es muy sencillo y los fondos de escenario apenas varían de un nivel a otro. Es cierto que no son molestos a la vista, pero al poco rato tienes la sensación de estar haciendo una y otra vez lo mismo. Es decir, el aspecto gráfico contribuye a reducir el interés del juego, ya que es demasiado monótono.
En cuanto al sonido, en cambio, Don’t Die, Mr Robot DX funciona mucho mejor, presentando temas de una mayor calidad que la de su contraparte visual. Tampoco es que el repertorio sea especialmente variado, pero sí que destila una calidad más que aceptable.
Conclusión
Don’t Die, Mr Robot DX es un juego sencillo. Como arcade funciona de forma impecable, pero debido a sus limitaciones artísticas y a lo sencillo de su propuesta, se vuelve monótono al poco rato. Además, uno no deja de tener la sensación de que se trata del típico juego que desde hace 10 años puedes jugar de forma gratuita en un navegador. Eso contribuye a hacer difícil querer pagar 9€ por Don’t Die, Mr Robot DX , por muy bien que funcione en las distancias cortas. Ahora bien, con una rebajita no te digo yo que no, ya que Don’t Die, Mr Robot DX es sólido como una roca, eso no se puede negar.
