Nicalis y Studio Saizensen han intentado colarse hasta la cocina en el mundo de los juegos de lucha en dos dimensiones. El resultado de esta colaboración es Blade Strangers, un título que visto desde fuera no presenta excesivas diferencias con respecto a los grandes exponentes del género como Tekken, Street Fighter o Mortal Kombat, pero que deja unas sensaciones bastante diferentes una vez el jugador se pone a los mandos. Un juego dirigido tanto a los amantes del género como a personas que hastían las intrincadas combinaciones de botones y combos infinitos sin posibilidad de respuesta.
La lucha debe ser para todos.
Y es que Blade Strangers no es un juego de lucha más, como ya hemos comentado anteriormente, si cualquiera de nosotros viese una partida en directo sin fijarse en como los jugadores están controlando los personajes no apreciaría excesivas diferencias con lo que podemos ver, por ejemplo, en Guilty Gears o Blazblue. Sin embargo al ponerse a los mandos el concepto cambia en gran medida, en Blade Strangers los personajes no tienen un botón para cada extremidad como suele ser habitual en otros juegos, en lugar de eso la formula se simplifica bastante y opta por emular los comandos típicos de la saga Super Smash Bros.
El juego cuenta con cuatro botones principales, ataque débil, ataque fuerte, especial y “ataque único” encadenar y mezclar estos cuatro botones será la base para crear los diferentes combos. La gran diferencia con respecto a otros juegos también radica en que para realizar movimientos especiales no será necesario hacer medias lunas o movimientos en Z con el joystick. Cada una de las variantes de los ataques se realizan combinando ese botón con los 4 ejes direccionales principales, lo que nos da una variabilidad de ataques bastante grande a pesar de no tener que “jugar con el joystick”.
Otras técnicas que incluye Blade Strangers es pulsar 2 o más de estos botones a la vez para realizar acciones algo más avanzadas, aunque igual de sencillas de introducir. Estas técnicas dependen normalmente de una barra de especial (de hasta tres niveles) que se carga en la parte inferior de la pantalla mientras golpeamos o somos golpeados por nuestros enemigos.
Con el consecuente gasto se pueden realizar ataques EX especiales que sirven como intermediarios para enlazar ataques de diferente tipo sin perder el combo, ataques counter para evitar que el rival nos arrincone o abuse infinitamente de repetir los mismos movimientos, e incluso movimientos ultra (utilizables también desde el botón R ) los movimientos más poderosos del juego y que tienen también dos niveles de carga.
Reconciliando dos estilos de juego.
El resto de comandos del juego son ya clásicos dentro del género, moverse y saltar usando el stick izquierdo o la cruceta (recomendada esta última opción), defenderse manteniendo pulsada la dirección contraria al flanco por el que nos están atacando, agarres y lanzamientos con ZR y la posibilidad de empezar un combo desde el suelo con ataques de recuperación.
Blade Strangers es un juego que se ve y se siente de forma bastante dispar, su sistema de control sencillo no perjudica en absoluto al plano jugable, la velocidad de los combates una vez se han aprendido las lecciones básicas (y se consigue en apenas unos minutos) es frenética y una de las mejores cosas que ofrece es que funciona perfectamente sea cual sea el perfil de jugador que se pone a los mandos. Presenta la suficiente profundidad a nivel de mecánicas como para no aburrir a los jugadores más experimentados, pero también permite que los usuarios más novatos del género puedan realizar combos que jamás esperarían poder completar en cualquier otro juego de lucha.
Otro de los aspectos que el juego sabe subsanar de manera más que correcta tiene que ver con uno de los principales miedos que tienen los jugadores más experimentados al enfrentarse con jugadores que abusan de utilizar una y otra vez los mismos botones. Strangers pretende ser un juego asequible para todos pero no es permisivo con este tipo de “tácticas”, ya que abusar de estas provoca que el daño se vea mermado de forma considerable, así como la velocidad a la que recarga la barra de especial.
La reivindicación del mundo indie.
A nivel de modos de juego Blade Strangers no es ningún exponente dentro del género, aunque nos encontramos con todas las funciones que esperaríamos en un juego de este estilo. Disponemos de un arcade, una sucesión de siete combates contra la CPU sin tener que entretenernos con ver las escenas de la historia. Un modo misiones en el que se desafía al jugador completar distintos combos con los distintos personajes (en este modo se aúna también el modo supervivencia), y el modo principal para un jugador, la historia.
En el modo historia se nos narra como unos servidores llamados Mote, al verse atacados por una inteligencia artificial superior a la suya, deciden invocar al último Blade Stranger, un defensor del mundo virtual capaz de enfrentar al ente llamado Lina. El problema es que muchos son los posibles candidatos a Blade Stranger y los Mote acaban por teletransportar a todos los candidatos y los introducen en una simulación de un campeonato mundial de lucha. El ganador de este torneo será el elegido finalmente como Blade Stranger y tendrá el “honor” de defender al mundo del poder de Lina. En definitiva, una mera excusa con la que poder reunir a todos los personajes que forman este dispar plantel.
Y es que Blade Strangers opta por reunir a los héroes mas “infravalorados” del mundo de los videojuegos. Los estudios indies quedan perfectamente representados gracias a incluir representantes de sagas como Code of Princess, Umihara Kawase o Cave Story, juegos que están directamente relacionados con Nicalis y Studio Saizensen. Aunque también se apuesta representantes de sagas ajenas a desarrolladora y distribuidora, con mucho peso en el panorama independiente actual, Azure Striker Gunvolt, Shovel Knight, The Binding of Isaac son las sagas que completan este curioso crossover. Juntos conforman un plantel bastante variopinto, algo escaso comparado con otros juegos de el género pero donde todos y cada uno de los personajes tienen su propio moveset y características que los hacen únicos.
Un buen multijugador debe ser la clave.
En el apartado multijugador Blade Strangers cuenta con un modo competitivo 1 contra 1 tanto a nivel local como online, por desgracia durante el tiempo que ha durado la redacción de este análisis no ha habido forma de poder jugar combates en modo online en un servidor Europeo. La única región en la que la actividad era más o menos alta fue EEUU.
En principio esto no debería ser un problema de cara a futuros, ya que el juego ha salido hace apenas unos días al mercado y no es un título por el que haya habido excesiva expectación, con lo que parece lógico que los servidores Europeos aún estén bastante vacíos. Habrá que esperar para ver como evoluciona esta carencia en los próximos días, aunque es necesario aclarar que en los pocos combates realizados entre Europa y América no ha habido un lag excesivo, aunque la experiencia quedaba muy lejos de ser óptima y el tiempo de búsqueda para el emparejamiento era bastante prolongado.
Esperamos que una vez el juego se afiance y empiecen a encontrarse jugadores de la misma región estos problemas se suavicen. En cualquier caso os mantendremos informados de como sigue evolucionando el apartado online del juego en nuestro foro, justo detrás de este análisis.
Claroscuros audiovisuales.
A nivel visual el título de Studio Saizensen apuesta por unos personajes con una estética estilo anime que le queda como un guante. Es destacable como han remodelado incluso personajes a los que nunca hemos visto con ese estilo como el propio Shovel Knight. Se ha conseguido que, aún con la diversidad de géneros y estilos que representan, todos los personajes del plantel se vean de manera homogénea. Las animaciones de los ataques y la cantidad de elementos que podemos llegar a ver en pantalla están también a otro nivel, los efectos que se consiguen son realmente vistosos (en ocasiones hasta exagerados siguiendo la estela “manganime”) pero en ningún momento sentimos que se pierda fluidez en la partida.
Por otro lado, los escenarios y decorados están modelados en tres dimensiones, este contraste ayuda mucho al jugador a situarse dentro de la partida y no permite que este se entretenga con otra cosa que no sea su propio personaje y el rival. Es una lástima que este contraste entre dos y tres dimensiones consiga también que los márgenes de los personajes no queden lo suficientemente limpios en pantalla. La intención original del estudio es emular el estilo artístico para los personajes a base de sprites, pero no acaba de quedar agradable especialmente si vemos el juego en una pantalla de gran tamaño.
Musicalmente el juego apuesta por melodías algo más genéricas, no son de mala calidad pero sí que se echa en falta una diversidad musical a la altura, lo ideal hubiese sido utilizar los principales temas de cada una de las sagas para sus respectivos escenarios, escenarios que por cierto sí están construidos respetando las raíces de cada personaje.
Conclusión.
Blade Strangers es un muy buen juego de peleas, permite a los jugadores adaptarse a sus controles sea cual sea su condición. Ayuda a los noveles a conseguir combos inimaginables y mantiene el tipo ante jugadores más habituados al género. Es una curiosa pero efectiva reunión de personajes de moda en el mundo indie, con un apartado visual estilo anime vistoso pero que en televisores grandes deja ver ciertas limitaciones. Presenta los suficientes modos de juego como para entretener en partidas en solitario, pero su punto fuerte son los modos multijugador, una lástima que al ser tan reciente no haya la suficiente gente disponible en servidores locales como para valorar eficientemente su rendimiento online.