Cuando Inti Creates anuncia que va a publicar un nuevo juego, este de inmediato capta la atención de muchos jugadores. Son conocidos por dar vida a juegos que recuperan la esencia y la forma de hacer juegos de los grandes clásicos de antaño. En Umbraclaw nos traen un juego protagonizado por una linda gatita, pero no una gata cualquiera, sino por una que tiene que escapar del infierno para regresar a la vida.
¿Podrás escapar del más allá antes de perder tus 9 vidas?
Umbraclaw es un juego de acción y plataformas en dos dimensiones de desplazamiento lateral, en donde tomamos el control de Kuon, una gata que despierta en el inframundo rodeada de peligrosas criaturas que han corrido la misma suerte que ella. Sin saber cómo ha perdido la vida y con el único recuerdo del amor que sentía por su dueña, se ve obligada a completar un ritual y enfrentarse a los peligros del inframundo para regresar a su antiguo hogar.
Aunque parezca mentira, en el infierno también podemos morir. Por suerte, Kuon cuenta con 9 vidas otorgadas por su condición de felino, las cuales le van a hacer mucha falta dado los peligros que abundan en este lugar ya que, al ser tan vulnerable, tan solo con un simple golpe perdemos una vida.
Puede que morir en el infierno tampoco signifique perder demasiado, pero fallecer aquí supone alejarse aún más del mundo de los vivos, provocando que Kuon vaya perdiendo su naturaleza felina y se vaya transformando gradualmente en una criatura más temible como aquellas que le acechan.
Por cada muerte que suframos volvemos a la vida adquiriendo una nueva habilidad. Estas habilidades están basadas en animales y son muy diversas. Podemos conseguir las garras feroces de un tigre, la potencia de embestida de un elefante, la versatilidad de un pájaro para dar un doble salto sobre el aire o la monería de un chihuahua que hará que los enemigos se queden quietos sin atacarnos; y así hasta una quincena de habilidades que os invitamos a descubrir por vosotros mismos. Cabe decir que estas habilidades, en cada partida, aparecen de manera aleatoria, por lo que no seremos capaces de saber que habilidades vamos a tener para afrontar cada jugada.
Umbraclaw ofrece un fascinante inframundo tan llamativo como siniestro
Aparte de su mecánica de supervivencia a base de transformaciones, el otro aspecto que diferencia a Umbraclaw de otras propuestas dentro del género es su apartado artístico. Nos esperan atrayentes escenarios diseñados a mano con un estilo que anda a medio camino entre el dibujado con ceras y la recreación de formas mediante recortes de papel, dando al conjunto un aspecto la mar de onírico. Nos esperan senderos laberínticos y llenos de color en el más allá.
En lo sonoro Umbraclaw pasa bastante desapercibido, haciéndose notar en sus efectos y diálogos doblados (en inglés), pero con melodías que quedan totalmente de fondo sin llamar la atención.
Entrando ya a valorar la duración que ofrece el juego, se podría decir que es un aspecto un tanto conflictivo. En primera instancia, llegar a los títulos de créditos supone poco más de 3 horas, lo cual se puede antojar muy escaso. Pero la propuesta a la que nos invita Umbraclaw es la de llegar al final sin que Kuon pierda su forma felina, es decir, sin morir en el intento. La historia de Kuon puede tomar varios finales dependiendo de nuestras acciones, destreza y empecinamiento por darle el mejor final posible a este adorable gato. Por lo que, para exprimir la experiencia por completo hace falta pasarse el juego unas cuantas veces.
La manera en que afrontamos la aventura cambia radicalmente si mantenemos nuestro estado felino o, por el contrario, llegamos a alcanzar nuestra forma más monstruosa. A medida que perdemos las vidas y adquiriendo nuevas habilidades, también nuestro aspecto adquirirá una apariencia más monstruosa, más fuerte y resistente. En cambio, con la forma de gato somos totalmente vulnerables, por lo que tenemos que evitar el enfrentamiento directo y tan solo podemos esquivar ataques y huir hacia zonas seguras, ya que un solo golpe significa una muerte instantánea.
Umbraclaw es todo lo que se podía esperar de sus desarrolladores: una propuesta de acción y plataformas clásicas a la que se le ha dado un giro de tuerca con el suficiente torque para resultar una experiencia tan única como especial. Las habilidades que se consiguen con cada muerte de la gata protagonista dotan a la jugabilidad de versatilidad, pero a lo mejor no llega a ser suficiente para afrontar la repetitividad a la que se expone. Su escaso contenido juega en su contra.
Versión del juego analizada: 1.0.0.
