Las ratas están muy mal consideradas por mucha gente por la mala imagen que se vende de ellas. Sin embargo poco a poco están ganándose el respeto que se merecen (en esta redacción lo han tenido desde siempre) y eso se traduce en que empezamos a verlas como protagonistas o personajes de peso en obras de ficción (gracias Pixar por Ratatouille), en lugar del papel que se les suele dar de seres apestados, enemigos o estorbos. Tails of Iron ofrece una historia de venganza y violencia en la que el reino de las ratas es el foco central y que, pese a haber salido hace ya dos años, recibe ahora una expansión gratuita para darnos más contenido.
Las ratas, unidas, jamás serán vencidas
La relación entre las ranas y las ratas está llena de sangre, pues la guerra entre ambas ha estado aconteciendo desde hace mucho tiempo. Las ratas siempre habían sido las oprimidas, pero el rey Rattus cambió la situación. Ahora el rey está ya viejo, y dos de sus hijos van a luchar para ver quién hereda la corona. Sin embargo la ceremonia no sale como se podría esperar y la aventura se convierte en un viaje contra de la tiranía de las ranas, que están asolando con todo a su paso y que han secuestrado a los hermanos del nuevo rey y protagonista del juego, Redgi.
Tails of Iron es de esos juegos que la gente llama tipo Souls, pero que ya según gustos podríamos no considerarlo como tal. La aventura tiene un progreso basado en historia y misiones secundarias (que a veces no hacen ir y volver de un lado a otro) en un mapeado que nos permite ir moviéndonos entre diferentes regiones, con viaje rápido si queremos. Este movimiento viene acompañado incluso de un poco de backtracking a lo metroidvania, el cual se basa en algunas habilidades o piezas de equipo que nos permiten ir a nuevos lugares.
El foco central está en el combate, muy medido y que cuenta además con tres niveles de dificultad en función de nuestra capacidad (nos hubiera gustado que se pudiese cambiar a mitad de partida), en el que podemos golpear, esquivar, bloquear o realizar un “parry” a diferentes ataques enemigos. Todo ello va en sintonía con los colores del ataque enemigo, pues cada uno de ellos tiene una manera más adecuada de contrarrestarse.
Tails of Iron, pequeño pero matón
Las zonas con enemigos abundan y hemos de tomar decisiones y posturas en muy poco tiempo, y por ello los puntos de guardado también. Además, existen lugares para recargar nuestra cantimplora (el curativo) y para que podamos modificar nuestro equipo (y también nuestras armas), pues esta es otra parte vital del propio combate, con atributos y un sistema de peso que nos hará ser más tanques o veloces.
Tails of Iron es un título cuyo dibujo luce muy bien, y el movimiento de sus personajes encaja con su personalidad. Es como si estuviéramos ante un un teatro hecho con cartones, pero con vida y movimiento, como si fuera un libro de ilustraciones. La sangre, viscosidades y todos los elementos brutales encajan mejor de lo esperado y, en definitiva, es un juego que luce muy bien. La voz del narrador funciona también muy bien (es la de Geralt de Rivia) y el resto del nivel sonoro acompaña. En cuanto a rendimiento, en general todo va fluido, aunque las cargas iniciales son un poco altas.
En lo relativo a su expansión, la cual debe jugarse una vez que se ha completado la historia principal, podemos señalar que sigue en la línea de lo ya visto, pero que sabe expandirse durante un mínimo de varias horas más. Nuevas misiones, jefes, desafíos de arena y piezas de equipo nos esperan, pero quizás lo más interesante es que hay nuevos escenarios y música, por lo que no es simplemente reciclar lo que ya se tenía. Y lo mejor de todo, es que llega a coste cero.
Tails of Iron cuenta con traducción al castellano, mapeado de botones, varias opciones de dificultad y un universo oscuro pero lleno de detalle. El mimo se nota por casi todas partes y puede que las hitboxes o ciertas animaciones requieran un aprendizaje por parte del jugador, pero en general no es casi nunca un juego injusto y se siente muy bien a los mandos. Su duración base supera las cinco horas, pero si vamos a completar las expansiones o el 100%, ese número puede llegar a duplicarse o incluso triplicarse. Además, tiene ratas como protagonistas, y eso siempre es un plus.
Versión del juego analizada: 5
