Antes de que el concepto de televisión e internet fuera como lo conocemos a día de hoy, los sábados por la mañana eran un momento especial para los más jóvenes. Libres de tener que asistir al colegio, devoraban su bol de cereales (o cualquier otro desayuno) mientras veían programas y series diversos, como Transformers. Para los que tienen ese recuerdo en su mente, Saturday Morning RPG les va a suponer una dosis de nostalgia y alegría.
Back to the past
Viendo la idea de juego, la historia va a ir exactamente encaminada por el mismo camino. Nuestro protagonista Marty tiene que recorrer una aventura divivida en cinco capítulos de una serie, en la que deberá salvar a su novia y al mundo del malvado villano Commander Hood (cuyo atuendo os resultará familiar). Sin embargo, este muchacho no estará solo, pues cuenta con un gran poder: un cuaderno que le permite usar objetos cotidianos de forma asombrosa en combate.
¿Qué nos espera en cada uno de los capítulos? Todo lo que solemos ver en un RPG: Escenarios que explorar para encontrar secretos, personajes con los que hablar y realizar misiones secundarias y, sobre todo, combates. Cada uno de los capítulos puede ser completado en una hora hora, pero si realmente queremos sacarlo todo, el tiempo invertido crece. Además, la opción de permitir escoger capítulos permite rejugar aquellos que nos interesen sin necesidad de repetir el juego completo.
Cada capítulo tiene una ambientación diferente, lo que da varieddad al juego. Todos los caminos los podremos recorrer a pie o en monopatín, para ir más rápido. Y, en este viaje, nuestro compañero fundamental es el humor. Las referencias a clásicos de los 80 de todos los ámbitos (cine, televisión, libros y juegos) nos esperan en cada esquina. Sin embargo, aquí hay dos problemas principales. El primero es que no seas conocedor del origen de dichas referencias, que hará que no disfrutes tanto el juego. El segundo, el idioma, y es que está completamente en inglés (lo que será una barrera para más de uno).
Wake up! It’s Saturday morning
Volviendo a los combates, nos encontramos originalidad y cierto parecido con Paper Mario, pero una sensación de repetición a la larga. El sistema, por turnos, se basa en utilizar una serie de pegatinas con usos limitados en cada batalla, y con ellas podremos golpear, recargar nuestra fuerza y realizar devastadores ataques especiales (con referencias también). Tanto para atacar como para defender hay un factor clave y es que no podemos estar pasivos, pues la pulsación de botones en el momento aecuado asegura mejores resultados.
En todo momento veremos la secuencia de turnos en los combates en la parte superior, lo que nos ayudará a organizarnos. La estrategia es clave, pero no tan determinante como en otros juegos. En general los primeros combates se hacen lentos, pero una vez entendida la mecánica se vuelve justo al contrario, un sistema rápido y fluido y que va sorprendiendo con las nuevas habilidades, pero que resulta monótono a la larga.
En lo estético, va a haber opiniones divididas. Es cierto que no es la panacea gráfica, pero aún así la sensación de contraste entre escenarios y personajes choca más de lo que nos gustaría. Los personajes, píxelados, son algo pobres en diseño (quizás buscándolo para hacer homenaje a la época) pero no nos entran por los ojos con el motaje final. Sin embargo, en los combates la cosa cambia y lucen considerablemente mejor. La música, realizada por compositores de juegos y películas clásicos, nos traslada al universo de los 80 y acmopañando a la acción en todo momento.
Saturday Morning RPG es una “carta de amor” a los desayunos de los 80 como ya hemos comentado, por lo que aquellos que sepan de lo que va la cosa van a tener humor por doquier en un juego que es fresco y original, pero que no termina de brillar.
