Como hemos visto en los últimos años, Nintendo Switch ha permitido que llegasen juegos antes imposibles de ver en una consola de la compañía japonesa, como el que nos ocupa. Forever Entertainment nos trae Phantom Doctrine, un juego desarrollado por el estudio polaco Creative Forge que nos trae estrategia isométrica por turnos para descubrir las intrigas políticas de la Guerra Fría en los años ochenta.
Frío y tensión
Es 1983, la Guerra Fría está en marcha y hay una conspiración global perpetrada por una organización misteriosa llamada Beholder. Luchando contra Beholder te encuentras tú y tu organización rival, The Cabal. En Phantom Doctrine, tienes la opción de jugar como un agente de la KGB soviética o de la CIA estadounidense a cargo de tu propio grupo de espías, pero independientemente de tu alianza, cada movimiento que hagas debe ser considerado cuidadosamente o habrá consecuencias letales. Este sentimiento de alto riesgo en la toma de decisiones estratégicas y un sentido constante de urgencia se convertirá en una segunda naturaleza a medida que avanza a través de la fascinante campaña que ofrece Phantom Doctrine.
La tensión y la sospecha están a la orden del día en Phantom Doctrine con gran efecto. El sistema de combate isométrico por turnos es complejo, pero de fácil comprensión, impregnado del sentimiento de paranoia, donde cada decisión y táctica, debe considerarse cuidadosamente, incluso antes de que comience la misión. La extensa narración está llena de personajes intrigantes y giros dramáticos en la trama, que corresponden a una épica de espías, con un claro sentido de desconfianza en las interpretaciones de voz (tanto en ruso como en inglés), y una banda sonora única para acentuar la atmósfera general.
Juegos de espías
Comienzas en tu base, donde envías agentes para revisar las actividades sospechosas donde sea que surjan en un mapa global gigantesco. Es posible que encuentren un informante que te brindará información que puede abarcar desde desbloquear la capacidad de comprar nuevos tipos de equipos hasta inteligencia sobre posibles objetivos, como la ubicación de un agente o base enemigo. Aunque las cosas son manejables al principio, en poco tiempo tu equipo estará desplegado por todo el mundo. Ver a los agentes en todo el mundo se vuelve emocionante, especialmente cuando sabes que algo grande está por suceder.
Su sistema de combate táctico puede parecer en concepto muy similar a otros juegos del mismo género. Los puntos de acción, la cobertura y la vigilancia serán conceptos familiares, pero también hay muchos sistemas únicos que enriquecen el la experiencia, y que lleva su tiempo dominar, debido a una gran cantidad de opciones disponibles cuando se trata de completar objetivos. Entrar en voz alta y con fuerza es una opción viable, y Phantom Doctrine incluso cuenta con mecánicas emocionantes para irrumpir habitaciones al estilo SWAT.
El sigilo es tu fiel amigo
Pero es mucho más gratificante usar tácticas de sigilo debido a la gran cantidad de estrategias disponibles. Puedes enviar un par de espías disfrazados y cumplir tu cometido bajo las narices enemigas sin que se den cuenta, puedes usar unidades de apoyo para ayudar a explorar un camino óptimo o enviar una granada de humo como distracción. Pero también puedes eliminar a todos silenciosamente y esconder los cuerpos antes de que alguien se dé cuenta, e encluso puedes enviar agentes durmientes para que hagan el trabajo sucio por ti.
También se puede optar por sacrificar parte del tiempo de la misión para realizar un muy necesario reconocimiento del mapa de misión, lo que te ubicará en una mejor posición, ya que así pueden aprovecharse las opciones de agentes de apoyo y disfraces colocados estratégicamente. Pero si te encuentras en una posición sensible con el tiempo, no habrá ningún apoyo disponible y los márgenes de error serán mucho más estrechos. Si bien aún puedes completar misiones de la manera que consideres más adecuada, un solo movimiento en falso puede acarrear mayores consecuencias para tu progreso, en comparación con la indulgencia relativa que la preparación y consideraciones adecuadas pueden darte, así que siempre que puedas tómate tu tiempo, que Phantom Doctrine te da todas las herramientas para que te sientas un espía profesional.
Si una misión se te sale de las manos, se deben tomar decisiones difíciles, como dejar atrás a un agente y arriesgarse a que sea capturado, o tratar de evacuar a todos a riesgo de que nadie sobreviva. Estas misiones de campo son emocionantes porque Phantom Doctrine logra equilibrar muchas mecánicas complejas y variables con una flexibilidad en la toma de decisiones tácticas, haciéndolo satisfactorio, característicamente distinto y temáticamente emocionante.
Te conviertes en director y gerente.
Los elementos de construcción de la base y mejora de personajes en Phantom Doctrine están tan bien realizados como los sistemas de combate. Estos utilizan una perspectiva familiar que divide la base en distintas áreas, como un taller y un departamento de análisis y salas de interrogación, los cuales están disponibles para actualizar a lo largo de la campaña. La sala más notable, sin embargo, es la sala de juntas de inteligencia. Aquí, Phantom Doctrine toma el conocido pizarrón de corcho para investigaciones y lo convierte en un agradable minijuego
A medida que los agentes desplegados descubren información de inteligencia y encuentren archivos secretos de misiones e informantes, todo se recopilará y se fijará al pizarrón de corcho, lo que requerirá que descifres las pistas generadas por la recopilación de información para desbloquear bonos o avanzar en la historia ofrecida en el juego. Es una mecánica divertida para ampliar en los temas de espionaje de Phantom Doctrine, y descubrir cómo una colección de pistas se relacionan entre sí al vincularlas todas, es inmensamente satisfactorio.
No confíes ni en tu sombra
La generación aleatoria de agentes hace que sean muy básicos, a pesar de que cuentan con una historia propia, las habilidades entre ellos son prácticamente las mismas y el juego dentro del gerenciamiento que tenemos que hacer, no facilita de forma intuitiva que podamos hacerlos especialistas en un campo específico para facilitar el cumplimiento de misiones, tendremos que navegar por muchos menús y pasar tiempo en las opciones para hacerlo.
Dentro de los agentes, encontrarás que existen agentes de apoyo, los cuales te ayudan enormemente en las misiones si los tienes desplegados en el mapa, son los que te ayudan al reconocimiento e inteligencia In Situ, por lo que siempre es buena opción siempre que el tiempo te lo permita, hacer un reconocimiento del área de misión y desplegar a tus agentes de apoyo y cumplir la misión de manera mucho más eficiente y con mejores resultados.
Pero tienes que tener cuidado en la confianza que pones en tus agentes, el juego para mantener las cosas interesantes puede hacer que hasta tu agente más confiable pueda ser un doble agente o un agente durmiente y que te pueda traicionar en medio de una misión intensa complicándote mucho las cosas para poder completarla, llegando hasta el fracaso de la misma.
Personalidad decadente
Phantom Doctrine nos ofrece una extensa campaña de más de 40 horas de misiones, pero que la campaña tenga tal duración hace que la estructura básica de las misiones de infiltración/extracción del objetivo o documentos, comience a sentirse monótona aún cuando el juego te entregue diferentes herramientas para encarar de forma distinta cada misión. La falta de variedad en los objetivos de misión ayuda a que el juego se sienta estancado y falto de ideas. A pesar de que cada área de misión cuenta con personalidad propia y ayuda a venderte la idea de estar en pleno conflicto político en los 80’s.
Un funcionamiento notable
Es de destacar el buen trabajo en optimización hecho por Forever Entertainment en la versión de Nintendo Switch de Phantom Doctrine, el juego cuenta con un rendimiento muy estable sin caídas de frames en los momentos más demandantes de la acción, siendo muy puntuales las caídas de rendimiento registradas. Aunque este rendimiento fue posible por los recortes gráficos en comparación a las demás versiones, siendo los modelados de los personajes los más afectados, aunque es un problema menor, dada la vista isométrica en la que se desenvuelve la acción.
Tal vez el punto técnico mas reprochable sean los tiempos de carga que podría irritar a más de uno, que dependiendo del tamaño y complejidad del mapa de misión puede llegar a tardar unos 15-20 segundos, antes que se pueda comenzar la misión.
Resumiendo
Phantom Doctrine toma el marco familiar de la estrategia isométrica por turnos y lo reutiliza con confianza en una experiencia única y satisfactoria, cuenta con una extensa campaña que te permite ir adquiriendo nuevas habilidades y herramientas que facilitan encarar las misiones de formas distintas y hacer la gestión de tu grupo de espías mucho eficiente, permitiendo que adaptes esas herramientas a tu estilo de juego a medida avanzas. La falta de una mejor gestión en los menús hará que pierdas tiempo encontrando la opción necesaria para mejorar tus agentes operativos.
Es un juego que te invita a tomarte tu tiempo y preparar las misiones según tus preferencias, la narrativa permite giros inesperados que te mantienen expectante a lo que pueda suceder, sin ser narrativamente potente. Y la mayor debilidad radica en su extensa campaña que hará que sientas que estás haciendo lo mismo incansablemente, aún así es una experiencia muy recomendable si eres aficionado a los juegos de estrategia por turnos.
