Out of The Box es una aventura conversacional desarrollada por Raiser Gamers, un estudio español cuyo modelo de negocio se basa en la colaboración con los denominados youtubers.
Una historia de mafiosos y criminales arrepentidos
En Out of The Box tomamos el papel de Warren Baker, un ex presidiario que acaba de salir de la cárcel y es incapaz de encontrar trabajo. Su primera oferta le llega de la mano de su antiguo jefe y consiste en hacer de portero de discoteca en su pub The Box. De momento, nada ilegal y con un día de trabajo puede que consiga pagarse el alquiler, el gimnasio y la manutención de su hija a la que apenas conoce. Warren quiere tomar las riendas de su vida, pero sus circunstancias sacarán una y otra vez a relucir su pasado.
Cuando nos ponemos a los mandos de Out of The Box descubrimos dos cosas. La primera que no es compatible con el mando pro y, por lo tanto, nos lo desconecta. La segunda que el juego presenta como tres tipos de jugabilidad diferentes.
Por un lado, tenemos la parte de aventura conversacional en la cual tenemos que leer las líneas de diálogo y escoger una acción de entre varias, con diferentes resultados en la trama. Por otro, la jugabilidad principal se centra en hacer de porteros de discoteca (y la explicaremos más adelante en detalle). Finalmente, cada cuatro semanas de trabajo tendremos que gestionar nuestros gastos con el dinero que hayamos ganado.
Trabajando Out of The Box
Como porteros de discoteca, tenemos que intentar cumplir las normas de etiqueta de The Box. Usamos los botones para seleccionar cada acción, lo que le da velocidad. Una velocidad necesaria, pues la cola es larga y la noche no tanto, por lo que si queremos ganar un buen dinero tendremos que gestionar nuestro trabajo de la forma más eficientemente posible.
Hay que impedir el paso de mendigos, borrachos y menores de edad. Los dos primeros grupos son fáciles de identificar, pero el segundo no. Por culpa del diseño de los personajes, es imposible diferenciar quien es menor de quien no. De hecho, el mismo diseño de personaje un día puede corresponderse a un menor y al día siguiente no. Por eso hay que pedirles el DNI pero, claro, ¿a todos? Llega a ser así por culpa del diseño. Conforme van pasando los días de trabajo se van sumando nuevas normas, como clientes VIP, pacificar a clientes enfadados, etc.
Entre jornada y jornada a veces podemos asistir a las partes de aventura conversacional en las cuales, como ya hemos mencionado antes, tomamos decisiones que influirán en el devenir de la historia. Algunas de las cosas que hagamos en la cola de la discoteca y la gestión de nuestros recursos también, así que el desarrollo de la trama puede ser muy diverso.
Quizá te guste, quizá no
Pero claro, ¿es esta jugabilidad realmente interesante? ¿Es la historia lo suficientemente atractiva como para tenernos pegados a los mandos? En mi caso, no puedo decir que sea así. La trama está manida de clichés y la jugabilidad es un poco maquinal, especialmente cuando eres portero de discoteca (el 90% del tiempo). Sin embargo, el hecho de que la historia varíe según nuestras decisiones hace que pueda llegar a ser interesante para cierto público.
Para ese público, Out of The Box funciona. Es un juego sin muchos problemas, más allá del tiempo de carga inicial, la incompatibilidad con el mando pro y los problemas con el diseño de personajes. Para los demás, tal vez no sea un título muy interesante y tampoco es especialmente barato.
