Juegos de naves y disparos en arenas cerradas ha habido toda la vida. Algunos de ellos en plataformas anteriores al salto de Nintendo al mundillo incluso. Sin embargo, este particular género tuvo un revivir especialmente marcado por Geometry Wars, título que ha influido mucho en otros lanzamientos, como el de #Funtime. Ahora toca ver si el “alumno supera o no al maestro”.
Dual stick #Funtime
El planteamiento del juego es sencillo, y se basa en utilizar un stick para moverse y otro para disparar en la dirección que estemos señalando. Con esto hay que esquivar enemigos, sus proyectiles y también hacer diana nosotros, mientras recogemos objetos que nos permitan obtener más puntos y así jugar indefinidamente, al más puro estilo arcade.
Además de lo básico, también hay disponibles mejoras que pueden comprarse en una tienda con puntos del juego, como un dash, más vida, más potencia de fuego y el esquema de cambio de colores, con el que podemos modificar el tono de nuestra nave con los cuatro botones frontales y así atravesar las cosas que sean de ese color sin sufrir daños, además de “pintar” el suelo de dicho color para que dañen a los enemigos.
Dos modos, mucha diversión
El juego ofrece principalmente dos modos. Una vertiente arcade, que ofrece distintos tipos de juego (supervivencia, oleadas, esquivas) en laque el objetivo es conseguir la mejor puntuación posible, y otra vertiente de campaña, que actúa como tutorial al inicio y en la que tenemos que completar 54 misiones con objetivos concretos y se nos brindan estrellas en función de lo bien que lo hayamos hecho. Por tanto, hay una buena cantidad de contenido, pero para poder sacarle el máximo partido hay que ser fan de lo arcade y la superación personal.
En lo visual y sonoro, el título cumple con creces lo que pretende ofrecer. Pocos colores, muchos neones y diferenciación de lo que hay en pantalla a pesar de los momentos caóticos en los que esta se llena, acompañados de música electrónica para dejarnos llevar en esta odisea de disparos. La respuesta es rápida y fluida y se juega bien tanto en portátil como en el televisor, aunque los efectos en una pantalla de alta definición lucen bastante mejor.
#Funtime es una sorpresa con todas las letras. Pocas veces un título puede ser más acertado para un juego y es que, si bien hay algunos aspectos que siempre podrían ser mejorables en relación con algunos escenarios u opciones a ofrecer, el resultado es bastante divertido y sabe coger lo bueno del género y añadirle su toque personal. Si te gustan este tipo de juegos, debes darle una oportunidad.
