Si conocéis la franquicia Fate, estáis de enhorabuena, pues con Fate/Samurai Remnant estamos ante uno de los mejores títulos de este universo, al margen de las novelas visuales originales. Y si no conocéis nada de Fate pero os gustan los títulos tipo Warriors o el mundo del Japón feudal, seguid leyendo también. Eso sí, os avisamos de su mayor pega: los textos solo están en inglés (las voces en japonés con algunos seiyuus muy populares).
Bienvenidos a la historia de Fate/Samurai
Nos situamos en la Era Keian, un período en el que Japón era como la conocemos de varios anime o películas de samuráis. Aquí vive Miyamoto Iori con su hermana, trabajando de mercenario para poder ganarse la vida. Sin embargo, un día su vida cambia cuando en su mano aparece un símbolo de Master, y se ve envuelto en la Guerra del Santo Grial (aunque en este caso es la vasija de la Luna Creciente) en la que siete personas luchan a muerte para poder ver cumplidos sus deseos.
Sin embargo, cada persona tiene a un un Servant, un héroe legendario devuelto a la vida como apoyo (aunque mantienen sus identidades en secreto para no desvelar su poder). En el caso de Iori, cuenta con Saber, una guerrera con espada de fuerza formidable, y juntos tienen la misión de ganar esta guerra sin dañar la ciudad en la que se encuentran, y mientras también teniendo que vivir, realizar misiones y limpiar la ciudad de forajidos. Así pues, vamos a tener que explorar la ciudad, hablar con su gente, mejorar a Saber y a Iori para que aprendan nuevas habilidades, y luchar con ellos en combates al estilo Warriors.
¿Qué quiere decir esto último? Que vamos a hacer frente a jefes y a grandes grupos de enemigos (no tan numerosos como en la saga mencionada), pulsando botones de ataque rápido, ataque fuerte, esquiva, movimientos especiales y otras técnicas, como la posibilidad de cambiar entre posturas de lucha que varían en velocidad, agresividad, velocidad y defensa. Durante la mayor parte del tiempo manejaremos a Iori y podemos comandar a Saber, aunque también podremos tomar control del Servant en diferentes momentos.
Lo de siempre, pero mejor
Estamos ante un juego que realmente ofrece algo similar a lo que hemos visto en otros títulos como Fate/Extella, Nights of Azure 2 o Naruto Ultimate Ninja Storm u otros similares, pero combinando muy bien la partes de historia, interacción con la ciudad en mundo semiabierto y los combates, sin que ninguna se haga demasiado repetitiva y aportando cierto componente estratégico. Eso sí, tiene que gustarnos leer, machacar botones y el lore japonés. Lo bueno, eso sí, es que no necesitamos saber nada de Fate, pues esta entrega es autoconclusiva (aunque os animamos a jugarla dos veces por temas de historia).
A la hora de jugar, en la parte de exploración nos encontramos con uno de los enemigos más clásicos de las versiones de Nintendo Switch, las caídas de frames. Obviamente hay gente que no tolera ni la más mínima, pero aquí no cortan el ritmo en ningún momento (vemos leves tirones en elementos de la pantalla, pero nuestro personaje “no lo sufre”). En las luchas puede haber picos también, pero no llegan a ser molestas o que nos afecten realmente en la ejecución de los comandos.
Por otra parte, su estilo gráfico, más allá del propio recorte de resolución, es bastante llamativo, especialmente en lo que a artes de personajes se refiere La música acompaña bien el ritmo de cada momento y sabe darle ese toque épico de anime cuando se necesita. Mención especial a las voces, que sorprenden para bien y nos sumergen de lleno en la trama y le dan mucha más vida a todos los personajes principales con los que hablamos.
Fate/Samurai Remnant es una sorpresa para bien, y que quizás con tanto lanzamiento “de mayor nombre” pueda pasar un poco desapercibido. Se trata de un Warriors que se siente diferente a pesar de tener la misma base, y sabe ofrecer una historia interesante con una ciudad viva en la que las secundarias se sienten orgánicas, algo digno de mención en un título de más de cuarenta horas.
Versión del juego analizada: 1.0.1
