Los resultados que ha presentado Nintendo esta mitad del presente año fiscal difieren bastante de los que hizo públicos por marzo de este mismo año y buena parte de la diferencia de cifras la tiene el abandono de la sobremesa actual de la compañía, Wii U, y la incertidumbre que se creó en torno al anuncio de NX, ahora conocida como Nintendo Switch.
Uno de los elementos que ha visto reducidos sus números ha sido el de las ventas digitales, lo que incluye tanto juegos enteros como DLCs.
El año pasado estuvo marcado por los DLCs de Mario Kart 8 y de Smash Bros. principalmente, y el hecho de que este año no haya habido ningún contenido descargable tan notorio unido al cuasi total abandono de la sobremesa por parte de Nintendo hacen que se hayan conseguido unas ventas muy por debajo de las del anterior periodo fiscal.
Sin embargo hay una lectura positiva de todo esto y es que sí se han superado los números del año fiscal anterior, que comprendía parte de 2014 y principios de 2015, lo que deja entrever que hay cada vez menos reticencia a este tipo de contenido.
