Yohane the Parhelion es un anime que nació de un April’s Fool Day como un spin-off de Love Live! Sunshine, que a su vez es una serie derivada de Love Live! Su protagonista, es una joven llamada Yoshiko que se autodenomina Yohane, pues tiene chunibyo (es decir, tiene un mundo interior propio de la adolescencia en el que se cree que es especial o mágica). De toda esta locura, que ya de por sí no es poca, INTI CREATES (los magos de la acción 2D) han sacado YOHANE THE PARHELION -BLAZE in the DEEPBLUE-, un metroidvania pixelado protagonizado por Yohane en el que la música juega un papel importante.
De mazmorreo en Yohane the Parhelion
Yohane, autoproclamada adivina, y su perra (“convertido” en un loba parlante) llamada Lailaps, se lanzan a la aventura en una mazmorra para rescatar a la gente de un peligro sin igual. La historia es una mera escusa para lanzarnos a jugar, y de hecho el propio juego se parodia sobre ella. Lo bueno de todo es que está en español, y eso es muy importante puesto que este título tiene un espectro de público (en lo jugable) bastante amplío, y puede ser un buen candidato a primer metroidvania de muchos jugadores.
El control de Yohane es en 2D, y podemos saltar y atacar, además de luego conseguir otras habilidades como la posibilidad de engancharse o el doble salto. El tema de los ataques es particular, porque realmente invoca a Lailaps, a alguna de las compañeras que hayamos liberado por el camino o a alguna de las armas que hayamos creado mezclando objetos que encontramos por el camino como si de una receta se tratase. Esta mezcla también se aplica al equipo que Yohane lleva, por lo que es un sistema de mejora de atributos que nosotros mismos gestionamos y funciona bastante bien.
En un botón tenemos el ataque de “arma” y en otro el de invocación de compañera, y la mayoría de ellas consumen Puntos Oscuros al usarlas, para evitar que se usen más de la cuenta (si nos quedamos sin puntos, nos bajaría la vida). Lailaps no consume nada, y en general, gracias a la posibilidad de hacer viaje rápido en cualquier momento a uno de los puntos de guardado, es difícil que nos veamos sin puntos a no ser que estemos junto a un jefe.
Una de las particularidades del juego es que va de menos a más en todo. Las habilidades y armas son muy sencillas de inicio, pero al final acaban siendo más interesantes y complejas. Eso sí, cada vez que usamos algo, especialmente al inicio, una pequeña animación se genera y Yohane “se para un instante” mientras lo hace, por lo que la acción es algo más pausada que otros títulos del estudio o del género.
A cantar y salvar el mundo
El mapeado está bien planteado, y tiene algunas salas que son procedimentales, otras que siguen un patrón y siempre podemos saber en qué sala nos falta algún tesoro por encontrar. Romper todo lo que veamos nos da materiales para conseguir curativos y de todo, así que nunca hay un problema de quedarse atascado. Incluso podemos tener un objeto que nos revive al morir y hace que suene la canción principal del juego.
En general, el juego hace un buen equilibrio entre una experiencia metroidvania y un acercamiento más casual, con puzles, backtracking, buena variedad de enemigos y combates contra jefes, sin ofrecer nunca una experiencia que necesite un gran nivel de jugador. La fluidez del juego está muy bien y en general cumple con todo lo que se puede esperar en Nintendo Switch de un juego así (no llega a los 120 fps que sí alcanza en la nueva generación).
El apartado pixel art funciona, es colorido y es muy llamativo tanto en criaturas como en escenarios. Todos los personajes tienen su retrato HD 2D al hablar, y además sus voces en japonés de la serie. Lo sonoro destaca además por su música, con temas cantados por las chicas y por las melodías que suena mientras avanzamos, con bastante gancho y sin que se hagan pesadas a lo largo de las ocho horas de juego.
YOHANE THE PARHELION – Blaze in the Deepblue – es un producto raro y casi único, pero es uno bien hecho. No podemos esperar un nivel de detalle en diseño de niveles y habilidades propio de otros juegos del género, pero sí algo muy competente y válido para un espectro de público amplío. Divertido para cualquier fan de la estética anime, incluso si no tienes ni idea de la serie.
Versión del juego analizada: 1.0.0
