Devolver Digital es una de esas editoras a la que siempre hay que seguirle la pista, ya que juego que saca, juego que es una maravilla. Esta vez nos trae Pepper Grinder, un juego que llamó la atención desde su primer trailer por su jugabilidad y un diseño artístico que recordaba a la Nintendo más mágica de la época de las 32 bits. Seguid leyendo para saber como nos ha taladrado esta obra.
Mi taladro y yo en Pepper Grinder
Pepper Grinder es un enérgico juego de acción y plataformas en dos dimensiones en donde Pepper, equipada con su potente taladro, se abre paso por todo tipo de paredes y superficies hasta alcanzar su objetivo. Lo que nos cuentan en Pepper Grinder es una historia de venganza donde Pepper, una buscatesoros, es asaltada por unos piratas despojándola de sus conquistas y lanzada a su suerte por un abismo… pero la suerte quiso que encontrase un taladro que se convierte en su mejor aliado para recuperar lo que es suyo.
De esta forma, avanzamos a través de niveles, cada uno con sus temáticas y mecánicas al más puro estilo Nintendo, desplazándonos por ellos tanto en horizontal como en vertical. Haciendo girar el taladro nos desplazamos a través de paredes, nos sumergimos en el agua y derrumbamos casi todo tipo de muros, al mismo tiempo que hacemos añicos a toda clase de enemigos y esquivamos las trampas y peligros de los escenarios. No hay obstáculo que se nos resista y para destrozar tan solo es necesario apretar un botón para accionar el taladro y la palanca de dirección para movernos.
Aunque los controles de Pepper Grinder sean tan simples como intuitivos, eso no ha impedido que nos hagan experimentar una cantidad ingente de situaciones con un diseño de escenarios de lo más variado. No hay cabida para la monotonía aquí, el ritmo vertiginoso al que taladramos en esta aventura nos hace penetrar en un momento icónico tras otro.
La revolución del taladro
En el apartado artístico tampoco se puede decir que Pepper Grinder haga nada mal. El juego hace uso de un pixelart bastante colorido y animado. Nos ha encantado su diseño a priori minimalista compaginado con detalles por doquier y unos ersonajes con bastante personalidad.
En cuanto al apartado sonoro destacamos más su variedad que su calidad. Si bien esta está compuesta de múltiples géneros musicales, tales como rock, jazz o electrónica y contar con un par de temas la mar de pegadizos, la verdad es que tiende a quedarse en un segundo plano sin llegar a acercarse a la acción que sucede en pantalla.
El talón de Aquiles de Pepper Grinder reside en su duración, pues se trata de un juego corto. Y no estamos diciendo que se haga corto de lo divertido que es, que también. Para superar todos los niveles del juego nos harán falta poco más de 3 horas. Aún así, conseguir todas las monedas escondidas, descubrir todas las salidas secretas y comprar todos los coleccionables nos puede hacer duplicar esta duración.
Pepper Grinder es un contenedor pequeño a rebosar de diversión. La mecánica central del taladrado, alrededor del cual giran una ingente cantidad de situaciones icónicas, nos hará pasar algunos de los mejores momentos a los mandos de una consola. Su diseño artístico también es una monería y está repleto de detalles por doquier. Lo único que ha conseguido empañar la aventura ha sido una duración que se nos ha quedado corta pero imprescindibles.
Versión del juego analizada: 1.0.1.
