Hemos tenido poco tiempo para digerir su llegada tras su inesperado anuncio, pero Astral Chain, el hasta ahora último juego de PlatinumGames, ya está casi aquí y tras sus primeras horas solo podemos esperar, una vez más, lo mejor.
En Astral Chain el mundo tal y como lo conocemos ya no existe; en su lugar, la materia roja ha hecho estragos y el plano astral se ha llevado a incontables seres humanos, eso sin contar con los miles con los que las quimeras, los seres de esa dimensión, han acabado impunemente, al menos hasta ahora.
Por fin la humanidad tiene un arma con la que hacer frente a esta amenaza, las legiones. Las legiones son, básicamente, quimeras domadas que han llegado a crear un vínculo con un humano al que están atadas por una cadena, algo que será una parte fundamental en una trama más enrevesada de lo que nos imaginábamos y que también afectará y de qué manera a su jugabilidad.
PlatinumGames es eso, jugabilidad, y aquí queda patente desde el primer segundo. Ya en la pantalla de inicio habremos de dar a unos botones activando así el núcleo de una legión, que sin embargo no podrá amaestrarse. Por fortuna no será un problema que nos ataña, ya que nosotros somos el elegido, o la elegida, porque casi siempre formaremos pareja con nuestro mellizo. Por cierto, podremos personalizar al avatar que elijamos, aunque poco (pelo y nombre), y este será mudo el resto de la partida, no así nuestro hermano.
Asimismo, sea cual sea nuestra elección, la historia no cambiará, una historia que ya os avisamos, jugaréis más de una vez. No porque sea estrictamente necesario, sino porque una segunda vuelta os permitirá ir por sitios que al principio permanecerán inaccesibles, y es que podremos vincularnos con diferentes legiones y cada una de ellas tendrá una habilidad especial, habilidades que además podremos mejorar.
El juego se divide, aunque tardaréis unas 2 o 3 horas en comprobarlo, en misiones secundarias y de historia. Las de historia son las que más trama tienen, obviamente, pero las secundarias serán las más numerosas y también las más variadas.
Esa es otra seña de identidad de este Astral Chain. Su director, Takahasi Taura, debuta como director tras desarrollar NieR:Automata y eso es algo que se nota. El mundo da sensación de libertad, aunque de inicio todo nos parezca encorsetado, y la variedad será una constante, así como se premiará el investigar y el saber usar inteligentemente los objetos. Y cuando decimos investigar nos referimos precisamente a eso, a realizar labores de detective, como buscar pistas y presentárselas a nuestro superior.
Porque este juego difiere de otros muchos de PlatinumGames en su forma de entender nuestra relación con el mundo pero también a la hora de afrontar los combates, no en vano lo de manejar a un ente atado a nosotros por una cadena no se ve muy a menudo. Los combos a base de combinar ataques fuertes y débiles han desaparecido y en su lugar lo que deberemos dominar será precisamente el uso de la legión pero también de la cadena, dos elementos que influirán también en cómo nos movamos por su mundo maravillosamente detallado. Golpear en corto o a distancia, usar la cadena para inmovilizar enemigos, para derribarlos, para saltar a donde esté la legión… las posibilidades se antojan de lo más numerosas.
Por el momento su control no ha hecho sino ganar en opciones y en complejidad, pero todo apunta a que cuando sigamos jugando y nos acostumbremos a él, estaremos ante uno de los mejores juegos de acción de los últimos años.
Todavía nos queda explorar mucho de su mundo y del plano astral así como probar varias legiones y su modo cooperativo, así que permaneced atentos a nuestro futuro análisis.
