Cuando SelectaVision se metió en el mundo de los videojuegos, muchos nos alegramos porque eso ha dado lugar a ediciones físicas como la de Blasphemous, pero saber que también se han metido en la distribución de títulos digitales nos pone todavía más contentos. Y es que así es como nos llega UNREAL LIFE a Nintendo Switch, un juego japonés creado por hako life que puede que no hubiéramos visto por aquí de otra manera.
Is this the Unreal Life or is this just fantasy?
En esta aventura encarnamos a Hal, una chica que se levanta de la calle tras caer inconsciente y haber perdido gran parte de su memoria. Su objetivo es encontrar a una persona importante para ella y recuperar sus recuerdos, pero por suerte no está sola y la acompaña 195, una IA de un semáforo preparada para ayudar a los peatones que lo necesiten. Juntos emprenden un viaje que les lleva a visitar lugares extraños con personajes muy particulares que dura algo más de seis horas y que tiene dos finales diferentes, aunque también guarda algún extra para aquellos que quieran rejugarlo y verlo todo.
Este viaje se traduce en una especie de aventura gráfica 2D de desplazamiento lateral relativamente lineal, en la que podemos interactuar con algunos objetos, coger otros y utilizar algunos en un lugar correspondiente para poder avanzar. También nos esperan algunas secciones de infiltración, minijuegos y pequeños puzles que, sin ser demasiado complicados, funcionan muy bien en su ejecución.
Lo peculiar que tiene esta aventura es, más allá de ciertos detalles de la protagonista y la trama que no vamos a desvelar, el sistema de tocar objetos, algo que nos permite ver su estado anterior en el pasado cercano (un “recuerdo”). Esto es algo que nos permite ver zonas del mapa que no parecían interactuables cuando sí lo son o encontrar la solución a un puzle que hemos de completar.
Hal 195
A la hora de ejecutarse, encontramos un ritmo pausado y lento, propio de un menú o confirmación para cada vez que queremos examinar un objeto o interactuar con un elemento del escenario, pero una vez nos hacemos a ello, podemos hacerlo más rápido si nos interesa. Además, el juego presenta un sistema pensado para aquellos cuyas sesiones están muy separadas en el tiempo, o bien que se han despistado y quieren revisar algún detalle. Esto se traduce en cerrar los ojos, una “habilidad” que nos permite revisar recuerdos vistos y conversaciones mantenidas.
Por todo lo demás, encontramos que hay pequeños detalles que nos fascinan. La vibración HD de muchos elementos al moverse, los ruiditos que hacen los personajes al hablar, 195, ciertos momentos paranoicos y una localización al castellano muy cuidada (aunque no perfecta) son aspectos que hacen que este juego nos encandile por completo.
A nivel audiovisual, nos encontramos con un píxel que ofrece muchos detalle en algunos momentos, pero que generalmente es más sencillo, y que presenta difuminaciones (adrede) en algunas zonas de la pantalla. Destacan los tonos azulados, pero en general hay una buena paleta de colores. Se incluyen también opciones de accesibilidad para facilitar la visión en tema de formato de letra y de colores que nos marquen cosas. Por su parte, la música es generalmente calmada, algo que funciona muy bien para tenernos en el ánimo que el juego busca, pues cuando cambia o se detiene el ritmo, nos ponemos alerta.
UNREAL LIFE es una de esas aventuras que no son muy comunes, a pesar de que tenga muchos elementos de su jugabilidad heredados de otros juegos. Sus personajes, su mundo y los pequeños detalles nos atrapan, aunque también es cierto que su ritmo y presentación no están pensados para los más impacientes. Quizás sea un tapado por llegar en una época de saturación de regalos físicos y del boom AAA de The Game Awards, pero los seguidores de las creaciones japonesas y de los indies peculiares van a encontrar aquí algo que seguro que les gusta.
