No será por la cantidad ingente de sagas queridas que tiene Sega guardadas en un cajón, pero cuando nos enteramos que Shinobi iba a estar de vuelta, junto al anuncio de otras sagas míticas de la casa del erizo, no pudimos estar más contento. Tampoco os imagináis cuánto nos alegramos cuando supimos que quien estaba detrás de su desarrollo era la desarrolladora Lizardcube, los mismos que trajeron de vuelta otras sagas de Sega, porque inmediatamente supimos que volverían a hacer un trabajo estupendo. Y no nos equivocábamos, porque con Shinobi: Art of Vengeance está de vuelta uno de los ninjas más famoso del mundo de los videojuegos en mejor forma que nunca.
La venganza nunca fue tan satisfactoria
En Shinobi: Art of Vengeance volvemos a encarnar a Joe Musashi, el maestro ninja del clan Oboro, quien, en un abrir y cerrar de ojos, ve como su aldea es asaltado por un grupo de feroces guerreros y liderada por temibles demonios. Tras perderlo todo y ver su aldea convertida en ruinas, su clan convertido en piedra y lo más sagrado de su vida convertido en nada; Joe Musashi emprende el camino por el que ninguno de sus enemigos desearía cruzarse. El camino de la venganza.
Comienza así una aventura de plataformas, exploración y acción. Acción a raudales. El ninja de Shinobi: Art of Vengeance cuenta en su haber con un arsenal de habilidades enorme con el que ser imparable ante cualquier adversario. Desde tajos rápidos, ataques potentes, lanzamientos de kunais, todo tipo de jujitsus, realización de los más variados combos, capacidad de poder atacar rodando por el suelo, desde las alturas y realizar todo tipo de ejecuciones que nos permitirán llevarnos por delante a todos los enemigos que hay en pantalla si hace falta.
Y no van a ser pocos los enemigos a los que nos enfrentaremos en Shinobi: Art of Vengeance, algo de lo que nos daremos cuenta ya desde la primera fase donde nos cruzamos con una gran variedad de ellos. Dominar la senda del ninja no será algo fácil, porque ya desde un primer momento se nos pone sobre la mesa un gran abanico de habilidades a las que se le irá sumando otras tantas a medida que avanzamos en las fases, las cuales serán necesarias utilizar con destreza para derrotar a todos estos oponentes que nos superan, en número y tamaño, de la manera más ágil, frenética y furiosa.
Nuestra habilidad como maestro ninja también será puesta a prueba durante las secciones de plataformas que se intercalan con las de enfrentamiento, las cuales ponen en evidencia el buen hacer que se ha tenido en el diseño de escenarios. Y no solo lo decimos solo por el equilibrio entre diseño, ritmo y desafío presentes en cado uno de sus escenarios, sino por los diferentes caminos y secretos que también esconden, haciendo del juego menos lineal de lo que acostumbre este género y más rejugable.
La venganza nunca fue tan llamativa en Shinobi
El apartado gráfico no solo es una delicia como nos tiene acostumbrado estos desarrolladores. Traer de vuelta obras clásicas a la actualidad debe de ser un trabajo de modernización mayúsculo, pero los trabajos de esta gente aprueban con sobresaliente. El resultado en este Shinobi: Art of Vengeance es un apartado artístico que sabe mezclar ese efecto cómic tan chulo al mismo tiempo que muestro un respeto real por el estilo de las obras clásicas. El diseño de escenarios medidos al milímetro, los fondos dinámicos a todo color, unos personajes con animaciones pasmosas. No paran de haber cosas en movimiento en pantalla y todo se mueve suave como la seda.
El apartado sonoro sorprende especialmente por sus efecto de sonidos, que saben transmitir usa fuerza, una ira concentrada que se desprende y nos absorbe con cada golpe, dejándonos claro que aquí no combatimos por sobrevivir, sino por venganza. En líneas generales la banda sonora está a buen nivel, dando intensidad en los combates y sabiendo marcar el ritmo en los tramos de plataformeo y exploración.
Superar todas las fases de Shinobi: Art of Vengeance nos llevará fácilmente más de 8 horas de juego. Lo cual ya convierte el regreso de este ninja en la aventura más longeva de todas. Pero por si esto fuera poco, también nos encontramos ante la más rejugable, y no lo decimos solo por su jugabilidad a prueba de bombas, sino por el backtraking que presentas las fases que nos harán regresar a ellas tras aprender nuevas habilidades para desbloquear nuevos caminos, secretos y coleccionables.
Shinobi Art of Vengeance convencerá tanto a los nuevos jugadores que nunca hayan escuchado nada de este ninja como a los veteranos que saborearon cada uno de juegos. La esencia del ninja se ve recogida en Shinobi: Art of Vengeance en un regreso que moderniza, renueva y potencia la experiencia dando como resultado un juego explosivo y lleno de diversión, donde podemos afirmar, sin error a equivocarnos, que se trata de un regreso por todo lo alto.
Versión del juego analizada: 1.0.1.

