Como si de Capcom estuviéramos hablando, la compañía californiana Electronic Arts, más conocida por todos como EA, también parece estar deseando que sus juegos, o mejor dicho, su juego, FIFA 18 (porque aquí no hay segundas oportunidades cuando se habla de Nintendo), fracase en ventas en Nintendo Switch, lo que les daría la excusa perfecta (porque malas e imperfectas ya han usado todas) para abandonar el barco de la Gran N y seguir al timón de las otras dos (el PC, para EA, es casi como Nintendo).
La jugada no es tan sucia como lo fue con Wii U, con ese Mass Effect 3 eclipsado por el anuncio de la trilogía en todas las demás plataformas justo antes de la salida del juego, pero las palabras son similares, con algo más de fingido amor por si la cosa al final es rentable y tienen que arrojarnos más despojos a los nintenderos, para que nos los comamos con gusto y encima estando agradecidos.
Ha sido el vicepresidente ejecutivo de la compañía, Patrick Södelund, en unas declaraciones a la revista EDGE, quien, para más inri, asegura ser un “gigantesco fan de Nintendo” y “llevarse mi Nintendo Switch a todas partes“, el que ha asegurado que el apoyo de EA a la consola híbrida de Nintendo (porque a Nintendo 3DS ha sido casi nulo) dependerá “de lo bien que lo haga FIFA y, a lo mejor, un par de otros proyectos“. Que oye, puede que los haya o puede que no.
Si FIFA 18 vende como esperan, que a saber lo que esperan vender de una versión recortada en una consola a la que directamente se refieren como portátil, entonces estudiarán crear más juegos para la máquina y crear tecnología específica para la plataforma.
Ante este chantaje llamamiento, ¿qué tenéis pensado hacer?
