Tras su paso por Wii U cuando a esta le estaban poniendo los últimos clavos en el ataúd, Darksiders: Warmastered Edition llega a Nintendo Switch. El juego de la que ahora es THQ Nordic es la primera entrega de las tres que actualmente tiene la saga Darksiders. Veamos qué tal le ha sentado a Guerra su llegada a la híbrida de Nintendo.
En Darksiders: Warmastered Edition tomamos el papel de uno de los cuatro jinetes del apocalipsis, Guerra, el cual es traicionado y culpado de llevar el apocalipsis al mundo antes de tiempo. Nuestro personaje buscará venganza en una historia muy bien narrada y con algunas cinemáticas con el motor de juego que son una delicia.
El sistema de juego es una fusión de conceptos, por un lado tenemos algunos muy similares a los The Legend of Zelda de mazmorras y puzles y por el otro las luchas clásicas de un hack’n’slash. Guerra dispone con el tiempo de diversas herramientas y armas para superar los obstáculos que se encontrará al intentar resolver los puzles y para explorar el mundo abierto que nos muestra el juego. Además contamos con una tienda donde vender las almas que recolectamos y comprar diversas mejoras, entre ellas nuevos ataques y habilidades con las que seremos más efectivos a la hora de afrontar los combates.
En cuanto a la duración del título, Darksiders: Warmastered Edition nos ofrece, parándonos un poco a explorar y resolver ciertos misterios, entre 15 y 20 horas. Pero si queremos obtenerlo todo y pasárnoslo al cien por cien podemos pasar de las 30 perfectamente. Tiene tres dificultades, siendo la última un reto para jugadores más experimentados.
Tenemos que también que mencionar el apartado artístico del juego, el cual es maravilloso en todo su conjunto. Las ilustraciones del menú, el diseño de personajes, del mundo y de las ya nombradas antes pequeñas cinemáticas, encajan al milímetro y te hace vivir una gran experiencia. Los detalles de las armaduras y accesorios son una pasada.
Quizás todo eso desentone un pelín con su apartado sonoro, que pese a ser bastante aceptable no está a la altura del resto del juego y de su ambientación. Eso sí, pocos juegos cuentan con un doblaje al castellano tan excepcional como el de Darksiders: Warmastered Edition.
No podemos acabar el análisis sin pasar por su apartado técnico. Por Darksiders no pasa el tiempo, el juego no ha envejecido nada y sigue siendo muy fresco. Tanto en modo portátil como en sobremesa va fluido y se ve estupendamente. Podemos destacar algunos fallos como que de vez cuando cambiamos de sala en el juego se hace una pequeña carga o que la forma de apuntado manual del joystick derecho no es fácil de manejar, pero no son tan determinantes como para hacerse molestas.
En conclusión podemos decir que Darksiders: Warmastered Edition es un gran juego y su adaptación a Nintendo Switch está a la altura de él. Tiene algunos problemillas técnicos pero para nada relevantes. Esperemos que este juego sirva para que se animen a traer el resto de las entregas a nuestra consola híbrida.