Los gatos siempre caen de pie. Las tostadas untadas caen por el lado con mermelada. Dos grandes mitos que nos hacen preguntar: ¿qué pasaría si se caen juntos? ¿Un agujero negro? No, pero sí que llega un plataformas muy simpático llamado CATO: Buttered Cat.
Gato y tostada unidos en CATO
Un gato y una tostada se encuentran y empiezan un viaje para encontrar la leche que ambos buscan. Esto se traducen en casi 150 niveles principales más otros 50 secundarios que pueden ser jugados en solitario o cooperativo. El control de cada personaje se hace con botones diferentes, pero si se unen se controlan unidos y pueden saltar ilimitadamente por su poder de paradoja.
Ahora, como suele pasar en cualquier propuesta de este tipo, hay lugares a los que solo se puede acceder si ambos están juntos, y otros a los que solo uno de ellos puede llegar. Esto viene acompañado además de una serie de puzles y elementos variables del escenario en función de si están o no unidos. Al final algunos momentos son predecibles, pero la variedad planteada en sus puzles es bastante admirable para un título así.
Simpático, variado y entra muy bien
El objetivo siempre es llegar de un punto A a un punto B, aunque es necesario conseguir energía para que la salida esté accesible, o bien tocar varios portales pequeños para que el grande final aparezca. Los niveles son cortos en su mayoría y eso los hace perfectos para ratos cortos, aunque más de 6 horas seguro que se nos va (porque alguno capaz es de engancharse y pasárselo en una o dos sesiones).
El estilo gráfico no es que sea demasiado especial, pues estamos ante un pixelart con los bordes marcados, pero es verdad que hay ciertos momentos en los que el juego se supera, con algunos ángulos y efectos que están por encima de la media. Sobre su sonido destacamos los efectos, que funcionan muy bien, y la música nos recuerda a la de la época de Game Boy Advance, aunque sin temas especialmente memorables (aunque sí son simpáticos).
CATO: Buttered Cat es una propuesta que puede pasar desapercibido por su aspecto de ser un indie más, pero está bien construido, resulta variado y tiene ese saber hacer de hace varias décadas donde un buen diseño hace que lo demás pase a un segundo plano.
Versión del juego analizada: Nintendo Switch (1.0.2)
