Sushi Striker sorprendió durante el pasado E3 como una nueva IP para Nintendo 3DS con modo online y una historia un tanto peculiar para presentar un título de combates de puzles con una mecánica particular: comer sushi. Nuestro personaje, Musashi (chico o chica) deberá luchar contra el imperio y conseguir que haya sushi accesible para todas las personas. Además de a la consola del 3D, el juego va a llegar a Nintendo Switch, y es ésta la versión que hemos podido probar y de la que os traemos una breve explicación de sus mecánicas y unas sensaciones iniciales.
¿Anime? ¿Pokémon? ¿Sushi?
Toda la presentación es muy similar a la de un anime (el argumento parece una parodia de las típicas historias de hecho), con secuencias de vídeo u otras escenas estáticas con textos en las que se va narrando más sobre el universo del juego y la aventura de Musashi. Quizás por eso sorprende que las voces estén solo disponibles en inglés, pero eso realmente no cambia lo que es el juego en sí. Además, todos los textos y subtítulos están en castellano, que es lo que realmente importa.
En Sushi Striker nos movemos por un mapa que tiene fases, y en cada una de ellas nos espera un trepidante combate. El tutorial nos guía en las primeras batallas para que poco a poco cojamos la mecánica, que en esencia es muy fácil: juntar, comer, apilar y lanzar. Eso es lo que haremos en cada batalla de una forma muy sencilla, ya sea con la pantalla táctil o con botones, los que funcionan sorprendentemente bien (y fácilmente) de forma que pueden convertirse en la opción de control idónea para muchos.
La épica aventura de Mushashi
Ante nosotros hay varias bandejas transportadoras de sushi, y debemos crear cadenas para comer. Las cadenas se hacen por el color de los platos y podemos juntar todos los que sea posible en siete segundos, para luego apilarlos delante de nosotros. En total hay espacio para hasta cinco torres de platos y, cuando llega una sexta, una de las apiladas se lanza de forma automática para atacar al enemigo. Sin embargo, podemos lanzarlas de forma manual también, lo que nos permite hacer cadenas de color y aumentar el daño.
A todo esto hay que añadir un poder especial de un genio del sushi que se puede activar una vez llenamos una barra. El primero de todos los que tenemos disponibles convierte todos los platos que se ven en pantalla en un solo color, por lo que la pila que podemos formar ahí es interesante. En general, todo el combate es simple (quizás demasiado) pero también es corto y ameno, lo que lo hace rejugable y, sobre todo, que nunca se haga muy pesado. La dificultad inicial para completar los combates no es demasiado alta, llegando a quitarle toda la vida al adversario antes de que él nos quite la mitad, aunque puede que algún objetivo adicional (en forma de estrella) se nos resista la primera vez que jugamos.
A falta de explorar más el mundo del Sushido en Sushi Striker, las primeras sensaciones no han sido nada malas. El concepto es sencillo pero adictivo, como la mayoría de puzles de éxito ¿Quizás podría ser un juego de eShop? Cuando llegue el análisis en unas semanas lo veremos. Lo que sí se nota es que viene de Nintendo 3DS, aunque en Nintendo Switch se ha aprovechado para ofrecer en alta definición todos los diseños de escenarios, personajes y, sobre todo, escenas de animación.