El día que decidí no adquirir una Wii U renuncié sin saberlo a disfrutar de grandes joyas como Xenoblade Chronicles X, Bayonetta 2 o Tokyo Mirage Sessions. Como amante de los juegos de rol, siempre tuve esa espinita clavada. Así que imaginaos mi sorpresa cuando se anunció que Tokyo Mirage Sessions #FE Encore llegaría a Nintendo Switch. Por fin puedo disfrutar de este sensacional crossover entre Shin Megami Tensei y Fire Emblem, dos de mis sagas favoritas.
Una segunda oportunidad para una joya oculta
Aunque no llegué a jugarlo el día de su lanzamiento original, sí que me hice eco de la terrible noticia de que el juego sería censurado en su versión occidental. Sin embargo, aún albergaba cierta esperanza de que para esta ocasión se tomara la decisión correcta. No ha sido así y una vez más llega un juego mutilado por la innecesaria censura, esta vez para todas las regiones. Cambios de vestuario, alteraciones de diálogos, quitar personajes de un plano e incluso cambiar la historia de todo un capítulo. Para mí, esto ha sido una sombra que me ha acompañado durante los primeros compases de la aventura.
Afortunadamente, Tokyo Mirage Sessions #FE Encore es mucho más y su brillo deslumbra por encima de la censura. Lo primero que llama la atención es su original temática, que gira entorno a la cultura idol japonesa. Siguiendo esa línea, el juego nos maravilla con una sorprendente puesta en escena, con un colorido vestuario, magistrales secuencias de animación y canciones de lo más pegadizas.
Poco se puede adivinar de la verdadera trama que esconde su historia, pero lo que si podemos adelantar es que disfrutaremos viendo como sus protagonistas trabajan sin descanso para alcanzar sus sueños en el mundo del espectáculo.
Más adelante, nos damos cuenta de que Tokyo Mirage Sessions #FE Encore bebe del lore de Fire Emblem con nombres y referencias, pero en el fondo es más parecido a un juego de la saga Persona en cuanto a jugabilidad. En este juego combatimos junto a un aliado, el Mirage, que si bien no es una manifestación de nuestros deseos más ocultos (como ocurre en dicha saga), cumple el mismo papel. Además, tenemos la oportunidad de conocer en profundidad a nuestros aliados y mejorar nuestra relación con ellos, otra de las señas de identidad de la saga.
Sobre el combate, las primeras sensaciones no podrían ser mejores y todo parece indicar que su potencial es ilimitado, en el que apunta a ser el sistema de combate por turnos más espectacular hasta la fecha. Se sienta sobre las bases de Shin Megami Tensei donde para salir airosos de los desafiantes combates, debemos prestar atención a las fortalezas y debilidades del rival para explotar su punto débil. De ese modo, podemos encadenar una serie de ataques adicionales en una orgía visual de efecto demoledor. Pero atentos, porque el enemigo también es capaz de hacerlo y no dudará un segundo en golpear donde más duele.
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