Los videojuegos indies están cobrando especial protagonismo este final de 2025 con numerosas propuestas que están llegando una detrás de otra. Propuestas únicas, diferentes y que sorprenden. En esta ocasión nos toca analizar el juego independiente Viewfinder, obra que sigue al pie de la letra esta definición, que propone nuevas ideas nunca vistas antes.
Transforma la realidad
Viewfinder es en esencia un juego de puzles, pero un juego de puzles diferente. Nos adentraremos en varios campos de prueba, escenarios totalmente tridimensionales, en donde la perspectiva juega un papel importante en todo momento. Nuestro objetivo es diseñar una nueva tecnología donde lo real y lo ficticio se fusionen en una sola cosa incapaz de separarse. Aunque la historia es un mero pretexto para hacernos avanzar de pantalla en pantalla, quedando en un segundísimo plano, lo cierto es que nunca parece que pase nada porque la sustancia recae sobre los puzles y la manera en que se resuelven. La mecánica principal es tan sorprendente como novedosa, visualmente impactante y divertidísima jugablemente.
Lo que nos propone Viewfinder es alterar la realidad. ¿Y cómo haremos esto? Pues en una primera instancia recogiendo fotografías que encontremos por los escenarios. Esta fotografía la pondremos delante nuestra y la colocaremos en el escenario. De esta manera, lo que había reflejado en la fotografía pasará a formar parte en la realidad de manera inmediata. Así como lo oyes. Podemos pasar cualquier tipo de objeto o imagen de una fotografía a la realidad.
Las posibilidades son infinitas, solo limitadas por nuestra propia imaginación. Moveremos objetos de un lado a otro, moveremos estructuras de un lado a otro, abriremos caminos donde antes no lo había, recuperaremos objetos del pasado que quedaron reflejadas en una fotografía o devolveremos al pasado lugares como si no hubiera pasado el tiempo. Jugamos con la realidad a nuestro antojo, porque si algo puede aparecer en una fotografía es porque todavía existe.

La libertad de crear
Gráficamente Viewfinder también es llamativo al presentar entornos muy coloridos con un acabado muy limpio pero cercano. Quizá al resultado final pueda resultar algo rígido por el escaso número de elementos en movimiento en pantalla,
En el plano sonoro encontramos melodías ambientales que se quedan en todo momento en segundo plano y un doblaje al inglés aceptable para la narración de sucesos, tanto presentes como pasados, de la propia historia.
No faltan los niveles que encontraremos en Viewfinder, ya que estos superan el medio centenar, pero si es cierto que la duración total de juego se puede antojar algo escasa. Superar todos los niveles principales y los opcionales nos va a llegar algo más de 4 horas. Aunque es posible volver a explorar los escenarios y encontrar todos los objetos coleccionables con el fin de alargar algo más la duración.

Solo por ofrecer momentos totalmente únicos y llenos de originalidad Viewfinder merece totalmente la pena, ya que nos demuestra que no todo está inventado. Su mecánica de alterar los escenarios jugando con la perspectiva y el original uso de la fotografía nos han encadilado. Si buscas un buen juegos de puzles con buenos rompecabezas no puedes faltar a tu cita con Viewfinder.
Versión del juego analizada: Nintendo Switch (1.0.1.) jugada en Nintendo Switch 2