Mientras Nintendo tiene olvidada por el momento la vertiente 2D de la saga The Legend of Zelda para nuevas iteraciones, van llegando juegos inspirados en esta modalidad de la famosa saga. En esta ocasión nos llega Blossom Tales 2: The Minotaur Prince, continuación del juego con nombre homólogo que llegó a nuestras Nintendo Switch en los primeros años de la consola.
Cuéntanos la leyenda
En Blossom Tales 2: The Minotaur Prince, al igual que en su predecesor, una de las características propias es la forma de presentar la historia. Esta se relata a través de los cuentos que un abuelo narra a sus dos nietos, los dos protagonistas de la historia, en la que toman los papeles de héroes.
Por lo demás, lo que nos espera es una fórmula jugable de sobra conocida. Con una vista cenital en dos dimensiones, exploramos escenarios a manos de nuestra espada y escudo. Recortamos el césped en busca monedas y corazones. Entramos en casas, hablamos con los habitantes de los pueblos, nos adentramos en mazmorras, resolvemos puzles que nos abren caminos y combatimos con temibles jefes finales.
El mapeado que debemos explorar es amplio, con varias zonas temáticas de ambientación clásica y claramente diferenciables. Tenemos un basto mundo que explorar con el fin de conseguir mejoras de vida, que como no podía ser de otra forma viene representada en forma de corazones; y adquirir nuevas armas que nos proporcionen nuevas habilidades.
A todo color
Como novedades con respecto a su primera entrega pues os podemos contar que hay pocas. Se repite la misma narrativa, la misma estructura y el mismo patrón. ¿Si ya funcionaba para que cambiarlo? Posiblemente es lo que debieron pensar. No hay muchos cambios pero si cosas mejores, como un mejor diseño de mazmorras, más intuitivas y equilibradas; también se ha mejorado el sistema de pociones pero al final poca utilidad tiene y queda desaprovechado.
Artísticamente nos encontramos en Blossom Tales 2: The Minotaur Prince un juego bastante bonito, que utiliza para su fin grandes y coloridos sprites que replican fielmente la imagen retro característica de las 16 bits, aunque con poca personalidad. En lo sonoro contamos con melodías animadas y alegres que acompañan a la aventura con gran acierto. En cuanto a la duración para superar la historia con algo menos de 10 horas nos valdrá, pero para los coleccionista esta se duplica.
Si decides apostar por Blossom Tales 2: The Minotaur Prince ya sabes lo que te vas a encontrar con pocas sorpresas ni disgustos. Es una secuela muy continuista, que a su vez es una réplica muy idéntica a una experiencia tan clásica como conocida. Un título perfecto para aquellos que solo quieran rellenar ese espacio vacío y que solo se conformen con recordar antiguas sensaciones, con todo lo bueno y malo que eso tiene.