La franquicia Pokémon lleva tiempo buscando reinventarse un poco, ofreciendo experiencias más allá de la saga principal con variaciones para así experimentar en diferentes terrenos. Siguiendo un poco los pasos de Leyendas Arceus pero con el foco totalmente en el competitivo, llega ahora Leyendas Pokémon Z-A Nintendo Switch 2 Edition (también disponible en la primera Switch, en la que presenta algo más de dientes de sierra y una experiencia menos fluida).
Leyendas Pokémon Z-A es una secuela del mundo de Kalos
A diferencia del otro juego de Leyendas, el que nos ocupa nos lleva a Ciudad Luminalia, una de las grandes urbes de la región de Kalos, pero en detalle. Obviamente no son menos de una decena de calles para que podamos recorrerlas en segundos, sino que se ha hecho zoom para ofrecernos en detalle todos sus entresijos, zonas y edificios. Además, aparecen zonas especiales en función del ciclo de día y noche para capturar Pokémon salvajes o para enfrentarnos a otros entrenadores (aunque luego la cosa cambia y se hace más libre).
Nuestro personaje es un recién llegado a la ciudad, que se ve envuelto en tener que participar como miembro del equipo MZ en los juegos Z-A, una disputa de combates en la que cada entrenador va avanzando desde el rango Z hasta el A. Nosotros vivimos en un hotel gestionado por cierto personaje de Pokémon X Y y su compañero Pokémon particular, pero una vez salimos de nuestra base de operaciones, nos disponemos a explorar el mundo, luchar y llegar a ser los mejores.
No solo tenemos que combatir una y otra vez mientras capturamos Pokémon en nuestros ratos libres, sino que también se nos presentan misiones secundarias clásicas y desafíos a conseguir en mitad de los combates, como usar ciertos ataques o acabar con un Pokémon de cierta manera. Estos desafíos son los que nos dan más puntos para subir de rango y hacen que los combates vayan más allá de luchar, dándonos un objetivo adicional para cada uno de ellos.
Combate en movimiento
Pokémon sigue siendo un juego de rol con cuatro ataques son especie, pero en esta ocasión los turnos se cambian por una especie de juego de rol de acción en la que dichos ataques se pueden hacer en cualquier momento y se recargan tras su tiempo de enfriamiento. De la misma forma, nuestro entrenador puede moverse por el escenario (y rodar para esquivar ataques de salvajes) para así que nos siga nuestro compañero y eso aporte variedad al combate. Se pierden los estilos de Leyendas Arceus, pero se añade un poco más de frenetismo permitiendo combates entre cuatro entrenadores al mismo tiempo.
Este título de Pokémon, a diferencia de muchos otros de la serie, no está pensado para para alguien que quiera descubrir la saga, sino que hay que tener un mínimo de conocimiento de la misma para su vertiente competitiva tan presente (por ello nos deja probar MTs constantemente). Y esto se nota en la modalidad online, en la que los diferentes premios que nos esperan no se consiguen simplemente jugando, sino que hay que llegar a cierto rango en cada una de las temporadas competitivas que se ofrecen.
Al final, eso sí, es una experiencia más ágil que la de la saga principal, y que además trae de vuelta las queridas megaevoluciones, gracias a las cuales podemos tener “jefes” en la aventura y de paso tener otro componente estratégico añadido a los combates. Se nota que Pokémon Champions está en desarrollo y que se está anticipando un movimiento para potenciar la parte competitiva de la franquicia para los más acérrimos.
Por último, si bien Leyendas Pokémon Z-A no presenta los problemas de rendimiento de los últimos juegos de la saga, si que es cierto que por su desarrollo en una sola ciudad (que es la más detallada de la saga) presenta aspectos que quizás no convenzan tanto, como una menor variedad de escenarios y de exploración, o que algunos detalles que nunca habían tenido importancia (como paredes con balcones planas) sean mucho más notorios ahora al esperarse más de ellos.
Versión del juego analizada: Nintendo Switch 2 (1.2.0)
